Marco Asensio arrancó el partido entre Real Madrid y Mallorca como titular, sustituyendo a Luka Modric y desempeñándose como mediapunta. Carlo Ancelotti confió en él y el futbolista balear no le defraudó. El internacional español hizo un hat-trick y no celebró ninguno de sus tres goles por respeto a su ex equipo.
La ley de ex en el fútbol, una norma no escrita pero década tras década continúa repitiéndose. Carlo Ancelotti, confeccionaba un once con varios cambios respecto al once que sacó en Mestalla. Una de esas caras nuevas era Marco Asensio, que viene reclamando minutos, al que el técnico italiano del Real Madrid quería sacarle el máximo rendimiento y exprimirle esa motivación que tenía al medirse al equipo de su tierra: el Mallorca.
Comenzó el partido y rápidamente se adelantó el Real Madrid con un gol de Karim Benzema al aprovechar un error defensivo de los mallorquines. En el 24′ llegó el primero de la noche para el conjunto blanco y fue obra de Marco Asensio tras mandar al fondo de la portería un rechace. 5 minutos después culminó su doblete con un golazo.
Al descanso el Real Madrid se marchó con un 3-1 favorable en el marcador. A la vuelta de vestuarios Marco Asensio volvería a anotar en lo que estaba siendo su gran noche. Benzema le asistió y el mallorquín controló, superó a un adversario y se colocó para sacar un zurdazo precioso desde la media luna del área. En ninguno de los tres goles quiso celebrar su gol Marco Asensio por respeto al club en el que se formó y en el que debutó como profesional.
Marco Asensio, que nació en Mallorca en 1996, guarda un gran recuerdo de su tierra natal y también del equipo en el que empezó a formarse cuando era un niño. Mientras militaba en el conjunto balear ya soñaba con jugar en el Real Madrid y fue su madre la que advirtió a Florentino Pérez, un día que se lo encontraron en la isla, que algún día defendería el escudo de la entidad de Chamartín.
