Melero López, árbitro del Real Madrid – Real Sociedad de la última jornada de Liga, pitó un penalti a favor del equipo blanco (ahora que ya no hay nada en juego) tras revisar la jugada en el VAR -donde está Figueroa Vázquez-. Así, el colegiado de este encuentro señaló un penalti por mano de Pablo Marín (jugador de la Real Sociedad).
En una jugada de Arda Güler en el área, Pablo Marín tocó el balón con la mano, algo que no vio Melero López en el campo. Sin embargo, y un minuto después, Figueroa Vázquez cumplió con su trabajo y avisó desde el VAR al colegiado para que fuera a ver la jugada en la televisión. Una vez que Melero López vio la jugada en el VAR, pitó penalti. La pena máxima la tiró Kylian Mbappé, que anotó su gol número 30 en esta Liga y que se pone en la primera posición de la Bota de Oro.
La cuestión de este penalti, que fue muy claro, es que ahora los árbitros sí van al VAR para ver estas jugadas. Ahora, que la Liga ya está decidida y el Real Madrid no se juega nada, una vez que el Barcelona ha ganado la Liga hace dos jornadas. Y es ahora, cuando el conjunto blanco ya no se juega nada, cuando los árbitros (en este caso Melero López y Figueroa Vázquez) sí hacen su trabajo y revisan jugadas que antes no lo hacían.
Y es que cabe recordar que cuando el Real Madrid sí se jugaba la Liga, estas mismas jugadas (u otras más claras) y estos mismos penalti eran obviados por los árbitros, ya fuera el de campo o el de VAR. Ahora sí hay revisiones y llamadas cuando ya no hay nada en juego. Hace varias jornadas, cuando si había mucho por disputarse, estas jugadas ni se revisaban.
Algo similar pasó hace una semana en el Ramón Sánchez-Pizjuán de Sevilla, cuando el equipo local se quedó con nueve jugadores por dos acciones que eran de roja clara, ambas revisadas por el VAR, pero que hace unas jornadas, cuando el Real Madrid sí disputaba la Liga, no eran pitadas.