Real Madrid y Barcelona vuelven a verse las caras. Las semifinales de la Copa de la Reina nos dejan un enfrentamiento a doble partido entre los dos grandes. El primer asalto será en el Alfredo di Stéfano de Valdebebas y el objetivo de las blancas pasa por llegar vivas a la vuelta que se celebrará en Montjuic la próxima semana, más allá de una victoria que sería histórica. El favoritismo de las culés es claro una vez más, aunque las blancas volverán a intentar romper una racha que se prolonga ya 15 partidos.
En una temporada en la que las blancas se encuentran peleando realmente por objetivos mayores a los que acostumbran, su bestia negra se presenta antes de tiempo. Las madridistas tienen grandes esperanzas puestas en una competición que se quedaron a las puertas de ganar hace dos temporadas, cayendo en la final de manera trágica contra el Atlético. Este curso esperan conseguir su primer título, pero en el camino aparece un Barça al que nunca han ganado.
La mejoría de las de Toril es clara, dado que los múltiples fichajes realizados por el club el pasado verano las han llevado a dar un salto de calidad evidente. Sin embargo, cada duelo directo con el Barcelona ha acabado en goleada. El último, la final de la Supercopa de España, en la que un contundente 5-0 dejó al Real Madrid sin opciones desde los primeros minutos del encuentro.
Ahora, las blancas sueñan con estar en la final de la Copa de la Reina. Aunque para ello, deberán hacer una machada doble, que es la de eliminar al Barça a doble partido. El primer asalto será en Valdebebas, en un Di Stéfano que a partir de las 19:00 horas de este jueves vivirá un apasionante duelo entre los dos mejores equipos de nuestro fútbol. El objetivo de las blancas pasa por mantener sus opciones de estar en la final, de cara a la vuelta que se celebrará en Montjuic la próxima semana.
Un Real Madrid lanzado
Después del parón de selecciones, el Real Madrid volvió a ganar, manteniéndose vivo en la pelea por la Liga F. No fue un partido sencillo, puesto que se enfrentaban a un Athletic que, además, comenzó adelantándose en el marcador. Sin embargo, Lakrar y Olga consiguieron darle la vuelta al marcador. El golazo de la capitana permitió al conjunto blanco llevarse los tres puntos y seguir metido de lleno en la lucha por uno de los títulos del presente curso.
El segundo se pondrá en juego en el Di Stéfano. El conjunto blanco llega tras seis victorias consecutivas –tras caer en la final de la Supercopa– pero enfrente tendrá a un Barcelona que tras ese último enfrentamiento directo acabó perdiendo ante el Levante. Eso sí, el balance en duelos directos para las culés es arrollador, puesto que suman 15 victorias en 15 partidos, soliendo llevárselos, además, por goleada.
Condicionado por las bajas
En el Real Madrid hay que lamentar la ausencia por lesión de Melanie Leupolz, Teresa Abelleira y Rocío Gálvez. Estas dos últimas han dicho adiós al curso por sendos problemas físicos que, en el caso de la gallega se prolongarán por un tiempo mayor, puesto que sufre una rotura en el ligamento cruzado anterior de su rodilla. La cordobesa, por su parte, tiene una rotura en el menisco externo que también la impedirá volver a estar con el equipo en lo que queda de curso.
Estas bajas hacen que el conjunto blanco vea reducidas sus opciones de sorprender en el once. Alberto Toril debería optar por un equipo similar al que forman Misa bajo palos; Silva, Lakrar, Méndez y Olga en defensa; Toletti y Angeldahl en el doble pivote, con Athenea en un costado, Linda Caicedo en el otro y Weir como enganche, mientras que en la punta estaría Bruun.