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El Real Madrid se aferra a la estrategia como arma para la Champions

Una competición como la Champions League decide a sus campeones por pequeños detalles. El Real Madrid tiene en el torneo continental la única baza para convertir una mala temporada en otra exitosa y para lograrlo Zidane guarda una carta bajo la manga.

Desde que llegó el entrenador francés al conjunto blanco, hay un aspecto (al margen de la evidente mejora física) en el que han dado un paso gigantesco: las acciones a balón parado.

La pizarra de Zidane funciona. Con Zizou al mando el Real Madrid ha anotado siete goles a balón parado (sin sumar penaltis), superando ya las cifras que se registraron en la era Benítez.

Bale anotó a la salida de un córner. (Getty)

Con el madrileño en el banquillo, sólo cuatro goles anotados en Liga llegaron de estrategia. Cabe puntualizar que uno de ellos fue de falta directa (James contra al Betis). Los otros tres goles fueron anotados por Sergio Ramos de chilena en Sevilla y por Bale ante el Eibar, tras un córner sacado en corto, y contra el Valencia, después de una falta lateral botada por Kroos.

El mejor equipo de la Liga a balón parado

Con Zidane, los datos han mejorado hasta colocar al Real Madrid como el equipo que mejor saca partido a la estrategia de la Liga con 11 goles. El Rayo, con siete, y el Athletic y la Real Sociedad, con cinco, le siguen desde lejos.

Contra el Celta el Real Madrid firmó tres de sus tantos a pelota parada. Pepe abrió el marcador con un certero remate de cabeza a la salida de un córner y Cristiano Ronaldo se encargó de firmar los otros dos. Primero con un magistral lanzamiento de falta ante el que nada pudo hacer el meta Rubén Blanco y el segundo en otro saque de esquina botado por Isco.

En total, 13 jugadores distintos han anotado a balón parado. Además de los tres goles en la última jornada, los de Zidane anotaron dos al Deportivo en el estreno del técnico francés, uno ante el Sporting y otro contra el Málaga.

En la plantilla son conscientes de la importancia de este tipo de acciones en una competición en el que las eliminatorias están tan igualadas como suele ser en la Champions League. De hecho, la referencia no está muy lejos. En la conquista de la Décima, tanto en la semifinal contra el Bayern como en la final ante el Atlético, el Real Madrid cimentó sus triunfos con la pelota parada.