En la icónica Piazza Navona, uno de los lugares con más encanto de Roma, vamos a poder seguir disfrutando de Eduardo Chillida porque este es el año de su centenario y no hemos dejado de celebrarlo por todas partes del país. Desde la muestra que se puede ver en Menorca, en Hauser and Wirth, la exposición que le ligaba con Cristóbal Balenciaga en el museo del diseñador, todos los eventos que se han realizado en Chillida Leku… y ahora, en Roma. El Instituto Cervantes de la capital italiana le rinde homenaje con una exposición que se acaba de inaugurar.
«La muestra más importante que Roma ha dedicado a Eduardo Chillida. Hermoso que sea en su centenario» dice Ignacio Peyró, director del Instituto Cervantes en Roma. De alguna manera, se dijo en la rueda de prensa, Italia saldaba la deuda que tenía con Chillida, y en un lugar icónico: en la sede que tiene el museo en la Piazza Navona, en la Sala Dalí: «Rodeado de obras de Bernini y Borromini» describía el director en sus redes sociales. Un homenaje en su centenario que llega treinta años después de la anterior exposición.
Una muestra bajo el nombre de Eduardo Chillida que reúne 41 obras del artista, entre las que encontramos dibujos, grabados y esculturas… Realizados en un periodo de tiempo muy concreto: entre 1948 y 1977, más de 60 años de una trayectoria prolífica en el que hubo una gran evolución. Una evolución palpable en esta exposición que acercará el trabajo de este artista vasco a los romanos, pero también a los turistas que quieran disfrutar de Chillida en el corazón de la capital de Italia.
Una exposición que ha sido inaugurada esta semana y a cuyo evento ha acudido el hijo del artista, por lo que tiene la bendición de la familia, que ha estado presente en muchos de los eventos que se han realizado por Chillida en su centenario. Junto a la colaboración de la familia hay que sumar el apoyo de Chillida Leku, su precioso museo en el País Vasco, y la Galleria Nazionale di Arte Moderna de Roma.
«Comisariada por Javier Molins, doctor en Bellas Artes y crítico de arte, comenzará con una serie de dibujos figurativos de Chillida, para dar paso a una sala con quince dibujos de manos, uno de los temas más recurrentes en su obra, y otra con 17 gravitaciones, otra de sus obras más características» explican desde el Instituto Cervantes de Roma.
Lo que podemos encontrar en esta exposición en la Piazza Navona no podemos desvelarlo, habrá que escaparse a la Ciudad Eterna para descubrirlo, pero desde el Instituto Cervantes recalcan que encontraremos una parte de la sala dedicada a un proyecto que ligó a Chillida con Italia. Y es que la muestra finaliza con una sala dedicada al pabellón español en la 29 Bienal de Venecia, lo que llevó al escultor a ganar el Gran Premio Internacional de Escultura, allá en 1958. Con no demasiados años de trayectoria, este premio supuso un gran cambio para el escultor.
«Esta sala reunirá tres esculturas y un relieve que formaron parte de aquella exposición» explican. Ya sabe, todos los caminos llevan a Roma. También los de Eduardo Chillida.
