Receta de Vinagreta de miel para ensaladas

La vinagreta de miel para ensaladas es muy fácil de cocinar y nos permite disfrutar de una gama de sabores muy especial. Las ensaladas necesitan de una serie de aliños para poder darnos lo mejor de sí mismas, se trata de un tipo de plato muy recurrente que tiene todo lo necesario para triunfar, pero siempre se nutre de ese sabor que tanta falta le hace para marcar su estilo. La base principal de cualquier ensalada son una combinación de vegetales que la hacen especial, sea de hojas verdes, quinoa o cereales integrales, la vinagreta para ensaladas siempre quedará bien. Toma nota de estos pasos y empieza a cocinar algo realmente increíble, en pocos minutos.

Propiedades de la miel

• La miel es uno de esos regalos de la naturaleza que se emplean en infinidad de usos. Podemos preparar desde cremas para conseguir una piel más brillante, hasta utilizarla en recetas llenas de sabor como ésta.
• Su sabor dulce la hace perfecta para convertirse en la base de infinidad de postres, aunque en caso de utilizarla como edulcorante siempre nos aportará ese sabor único que solo este alimento tiene.
• Entre sus propiedades está la posibilidad de favorecer una serie de procesos naturales, servirá para mejorar la digestión y ayudar a curar algunas ulceras. El hecho de usarse como en este caso para ensaladas nos permitirá poder disfrutarlo.
• La miel también se usa para tratar infecciones como antibiótico natural. Esos catarros de invierno se curan mejor con una buena dosis de miel con limón caliente. En este caso de aliños nos servirán para nutrirnos de un alimento único que cubrirá esas ensaladas repletas de amor.

Ingredientes:

• 3 cucharadas de miel
• 50 ml de vinagre
• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

Cómo preparar una vinagreta de miel

1. Esta vinagreta de miel se preparará muy rápidamente solo necesitaremos tener una materia prima de lujo. La miel será mejor que sea fresca y esté a temperatura ambiente que ayude directamente a poder mezclarla mejor con el resto de los ingredientes.
2. Le incorporaremos el sabor ácido del vinagre y mezclaremos con unas varillas convencionales estos dos ingredientes. Deberán quedar muy integrados antes de la llegada del otro protagonista del aliño.
3. Nos faltará el aceite que acabará de darle ese sabor intenso al aliño. Le añadiremos un par de cucharadas y dejaremos que se mezclen todos los ingredientes hasta formar una pequeña emulsión repleta de sabor que dará personalidad propia a cualquier ensalada.