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La multa de la DGT que te pueden poner aunque no vayas conduciendo: hasta 500 euros

Multa de la DGT

Cuando pensamos en las normas de tráfico y en las posibles sanciones, lo habitual es centrarnos en el conductor. Es él quien tiene en sus manos el control del vehículo, por lo que normalmente se considera el único responsable ante cualquier infracción. Sin embargo, esta percepción está empezando a cambiar. La Guardia Civil ha iniciado una campaña de concienciación para recordar que los acompañantes no están exentos de cumplir con ciertas normas. Y lo más llamativo de este recordatorio es que, en algunos casos, los pasajeros también pueden recibir una multa de la DGT, incluso si no están al volante.

Así, comportamientos que antes se consideraban inofensivos ahora pueden resultar en sanciones económicas considerables. Esta actualización del Reglamento General de Circulación se debe al objetivo de reforzar la seguridad vial en las carreteras españolas. Aunque muchos ciudadanos desconocen estas normas que también implican a quienes viajan como acompañantes, la ley no hace distinciones cuando se trata de evitar riesgos innecesarios. Por eso, es importante tener presente que el simple hecho de ser pasajero no te libera de toda responsabilidad dentro del coche.

La multa de la DGT los pasajeros

A raíz de múltiples situaciones observadas en carretera, la Guardia Civil ha comenzado a compartir, a través de sus redes sociales,  avisos sobre determinadas conductas dentro de los vehículos que pueden ser motivo de sanción. Estas medidas buscan proteger no sólo a los ocupantes del coche, sino también a otros usuarios de la vía como motoristas, ciclistas o peatones.

Una de las acciones más peligrosas y penadas es la de arrojar colillas por la ventanilla. Aunque puede parecer un gesto insignificante, se considera una amenaza seria para la seguridad vial y para el medio ambiente. Tirar un cigarro encendido por la ventana puede provocar incendios forestales en determinadas épocas del año y pone en peligro a los conductores que circulan detrás, especialmente a los que van en moto. Por esta razón, esta infracción puede suponer una multa de 500 euros. En el caso de que sea el conductor quien lo haga, además del importe económico, se le restarán seis puntos del carnet de conducir.

Otra de las infracciones más comunes es la obligatoriedad del cinturón de seguridad. Esta norma, que lleva décadas vigente, se aplica a todos los ocupantes del vehículo, sin importar si están sentados en los asientos delanteros o traseros. La multa de la DGT por no utilizar el cinturón es de 200 euros, y va directamente al pasajero que no lo lleva puesto, sin que ello afecte al conductor, salvo que se trate de un menor de edad, en cuyo caso el responsable sí sería quien va al volante.

La tercera conducta destacada por las autoridades es mantener una postura inapropiada durante el viaje. Aunque pueda parecer una cuestión menor o relacionada únicamente con la comodidad del pasajero, adoptar una postura inadecuada puede tener consecuencias graves en caso de accidente. Una de las más comunes es colocar los pies sobre el salpicadero. Esta posición, aunque tentadora en trayectos largos, puede resultar extremadamente peligrosa en caso de frenazo o colisión, ya que el airbag podría causar lesiones muy graves si se despliega con fuerza contra las piernas del pasajero.

En este caso, la multa de la DGT puede oscilar entre los 80 y los 100 euros. Lo curioso es que, al contrario que en los casos anteriores, esta infracción suele repercutir directamente en el conductor, por ser considerado responsable del comportamiento de sus ocupantes.

La Dirección General de Tráfico y la Guardia Civil aseguran que la intención es promover una cultura de responsabilidad compartida dentro del vehículo. La seguridad vial es una tarea colectiva en la que cada ocupante tiene un papel relevante. No se trata sólo de conducir con cuidado, sino también de viajar con conciencia, sabiendo que nuestras decisiones y acciones pueden afectar tanto a nosotros como a los demás.

Recomendaciones

Para evitar sanciones innecesarias, conviene que los pasajeros tengan en cuenta una serie de pautas básicas:

  • Abrocharse el cinturón siempre, sin importar si se está en la parte delantera o trasera del coche.
  • Evitar arrojar cualquier objeto por la ventanilla, especialmente colillas encendidas o basura que pueda entorpecer la circulación.
  • Mantener una postura adecuada, con los pies en el suelo y el respaldo del asiento bien colocado.

Estas recomendaciones, más allá de evitar multas, tienen como objetivo garantizar que todos lleguen a su destino sanos y salvos. Al fin y al cabo, un viaje seguro depende de todos los que van en el vehículo. Con esta nueva campaña de sensibilización, la Guardia Civil no busca culpables, sino aliados. Entender que la seguridad en la carretera no recae exclusivamente sobre quien conduce es un paso fundamental hacia una conducción más consciente y responsable. Las multas a pasajeros son una forma de recordar que cada acción, por pequeña que parezca, puede tener consecuencias graves.

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