Alerta de los expertos por las motos que no pasan la ITV: si cometes este error suspenderás

La seguridad sobre dos ruedas no sólo depende de la habilidad del conductor, sino también del adecuado estado mecánico del vehículo. En este contexto, la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) juega un papel esencial al garantizar que las motos que circulan por las carreteras cumplan con los requisitos mínimos de seguridad. Sin embargo, un reciente informe de la patronal AECA-ITV y la cadena de talleres Euromaster ha revelado datos alarmantes sobre el estado de muchas motos en nuestro país.

De acuerdo con este informe, buena parte de las motos que no superan la ITV presentan fallos graves. Entre las más de 4,1 millones de motocicletas que circulan por España, más del 50% supera los 15 años de antigüedad. La ITV, que se ha convertido en un filtro necesario para evaluar el estado de los vehículos, detecta problemas que en muchos casos podrían haberse prevenido con un buen mantenimiento.

El fallo que cometen las motos para no pasar la ITV

Uno de los problemas más recurrentes que impide a las motos superar la ITV es el mal estado del sistema de alumbrado y señalización. Según los datos presentados, el 32,4% de las motocicletas rechazadas presentan defectos graves en este apartado.

Este porcentaje es preocupante, dado que una iluminación adecuada es crucial para la visibilidad del conductor, de manera que el resto de usuarios de la vía puedan identificar su presencia. La normativa vigente en España obliga a las motos a circular con el faro delantero y el piloto trasero siempre encendidos, una medida que cobra especial relevancia en condiciones de baja visibilidad.

La falta de un sistema de alumbrado en perfecto estado expone al motociclista a un mayor riesgo de accidentes, y también acarrea sanciones económicas. Las multas por incumplir esta normativa pueden ascender a 200 euros y conllevan la pérdida de tres puntos en el carnet de conducir.

Otros defectos frecuentes

Aunque los problemas de alumbrado lideran la lista, no son los únicos que afectan a las motos en las inspecciones técnicas. Los neumáticos desgastados o en mal estado también son una causa habitual de suspensión en la ITV. La calidad y el dibujo de los neumáticos son fundamentales para garantizar una buena adherencia al asfalto, especialmente en situaciones de frenado o en condiciones climáticas adversas. Unas ruedas en mal estado incrementan el riesgo de derrapes y caídas, poniendo en peligro la integridad física del conductor.

Otro aspecto relevante es el sistema de frenado. Defectos en los frenos, como el desgaste excesivo de las pastillas o fugas en el sistema hidráulico, representan un riesgo crítico para la seguridad vial. Las suspensiones también suelen aparecer en los informes de la ITV como elementos problemáticos, ya que su mal funcionamiento afecta directamente la estabilidad del vehículo y la capacidad de respuesta ante imprevistos.

Por último, las emisiones contaminantes son otro factor importante. Muchas motos, especialmente las más antiguas, no cumplen con los límites establecidos por la normativa ambiental. Este problema no solo afecta al medio ambiente, sino que también implica multas y la necesidad de reparaciones costosas para ajustarse a los estándares.

A pesar de los riesgos asociados, algunos conductores eligen no reparar los defectos detectados en la ITV y optan por circular sin haber superado la inspección. Esta práctica es extremadamente peligrosa, ya que incrementa la probabilidad de sufrir accidentes graves. Además, conducir sin una ITV vigente puede acarrear sanciones económicas significativas, la inmovilización del vehículo y problemas legales en caso de siniestro.

El mantenimiento preventivo es clave para garantizar que las motos se encuentren en condiciones óptimas antes de pasar la ITV. Revisar regularmente elementos como las luces, los frenos, los neumáticos y el sistema de suspensión puede evitar sorpresas desagradables durante la inspección. Además, realizar un mantenimiento periódico reduce el riesgo de averías inesperadas y mejora la durabilidad del vehículo.

Renovación del parque vehicular

La antigüedad del parque motociclista en España es otro factor que contribuye a los problemas detectados en la ITV. Más del 50% de las motos en circulación tienen más de 15 años, lo que aumenta la probabilidad de fallos mecánicos y dificulta el cumplimiento de las normativas actuales.

En resumen, los datos revelados por AECA-ITV y Euromaster destacan la necesidad urgente de mejorar el mantenimiento de las motocicletas en España. Los fallos en el sistema de alumbrado, los neumáticos, los frenos y las emisiones contaminantes son problemas comunes que podrían evitarse con un adecuado mantenimiento preventivo. Además, la renovación del parque vehicular es un objetivo clave para garantizar la seguridad vial y reducir la incidencia de accidentes relacionados con fallos mecánicos.

La ITV no se debe percibir como una simple obligación legal, sino como una herramienta esencial para proteger la vida de los conductores y de quienes comparten la carretera con ellos. Cumplir con la normativa y realizar las reparaciones necesarias evita sanciones, al tiempo que garantiza un entorno más seguro para todos.