Adiós a la etiqueta B en estas ciudades: el cambio confirmado que llega en 2025

Cada vez hay más conciencia ambiental en las ciudades de nuestro país, lo que ha dado lugar a unas medidas más restrictivas sobre el acceso de vehículos a las áreas urbanas, especialmente en cuanto a los coches que emitirán una contaminación más alta.

Las ZBE están reguladas por una normativa europea

Las ZBE que regulan las normas europeas que hace que los municipios de más de cincuenta mil habitantes y también los que tengan más de veinte mil habitantes con más de determinados niveles en cuanto a contaminación, delimitando algunas áreas para la reducción de la polución.

La etiqueta B es la siguiente en ser «perseguida»

Todavía existen muchos vehículos con la etiqueta B, los cuales son los que están entre el año 200 y 2006, en el caso de los de gasolina y de diésel entre 2006 y 2015.

Este tipo de restricciones las encontramos como una realidad más cercana en una serie de ciudades de nuestro país, en especial desde 2025.

Madrid y su liderazgo

En la CAM son pioneros al implementar las ZBE, en especial en zonas céntricas y de tráfico elevado. Los coches sin etiqueta no van a poder circular por el municipio, con una serie de excepciones limitadas a los servicios esenciales.

Los coches que tienen etiquetas B y C pueden acceder a Madrid sin restricciones, pero en las ZBE y Plaza Elíptica pueden estacionar en un aparcamiento autorizado.

En 2025 se endurecerán las medidas

El año que viene 2025 va a endurecer todavía más las medidas. A comienzos de año, ningún coche sin etiquetas va a poder circular por la totalidad de la capital, con independencia del padrón del dueño del vehículo.

Los «B», van a ver como cada vez tendrán más restricciones, por lo que en 2028 van a afrontar restricciones para acceder, una medida que irá en línea de las restricciones futuras que tienen etiqueta C.

¿Y en Cataluña?

Estamos en otra región que implementa con ambición de las ZBE. Ahora hay ciudades como Barcelona, Badalona, Girona o Tarrasa que la tienen sus ZBE. Aquí los vehículos sin etiqueta carecen de acceso.

El caso es que desde 2026, el alcance de dichas restricciones va a ampliarse para la inclusión de vehículos con la etiqueta B. Además, es que la Generalitat anunció que las va a extender en la ZBE a la totalidad de ciudades que tengan más de 20.000 habitantes.

Por lo tanto, dentro de dos años, los vehículos que tienen etiqueta B van a tener prohibida la entrada en los días de elevada contaminación y en 2028, será la definitiva la restricción.

La normativa terminará afectando de forma importante a los conductores, abarcando a algunas de las zonas urbanas de mayor tamaño y tráfico en España.

El futuro y la movilidad

Estas etiquetas ambientales son referencia de clara a la clasificación de los coches en base al nivel de emisiones y tomar la decisión de cuáles son los que pueden circular por las áreas urbanas restringidas.

Según se avanza para cumplir los objetivos a nivel medioambiental de la U.E., que van a incluir la prohibición de la comercialización de los coches de combustión para 2035 y que se elimine por completo el uso para 2050.

Esta clase de restricción en las ZBE lo que hace es anticipar un futuro a nivel de movilidad que favorecerá a los que menos contaminan.

El que se cree un parque hará que  existan más coches eléctricos con menos de combustión, se va a presentar como un camino factible, el cual impulsará las políticas favorecedoras ene cuanto al medio ambiente.

El que se implementen las ZBE en las ciudades más importantes de nuestro país para 2025, serán el inicio del cambio de en las ciudades españolas.

Las ciudades se están moviendo

Las decisiones que se han tomado en las urbes principales  van a cambiar, tanto el uso como la posesión de los automóviles en los centros urbanos de los años venideros.

Existe una transición que se quiere hacer un modelo de transporte de más limpieza y sostenibilidad más importante.

A la vez, los conductores de este tipo de vehículos con motores de combustión que tienen unos años se enfrentan a una determinada decisión, adaptándose a un modelo nuevo en materia de movilidad, de cara a prepararse de las restricciones que son más restrictivas en sus urbes.

Como vemos, los años próximos van a seguir contando con una serie de movimientos que ayudarán a que en Europa las ciudades van a ser mucho más limpias.

En este sentido, pese a los avances, habrá que ver si en otras zonas del mundo también se produce un avance en conciencia medioambiental, algo que se pone en duda con el regreso a la Casa Blanca de Donald Trump.