En aguas pitiusas: Todos los detalles de la boda de Michael Fassbender y Alicia Vikander

Era un secreto a voces, pero nadie conocía los detalles. Michael Fassbender y Alicia Vikander ya son marido y mujer y así lo confirman las alianzas que ambos lucen en sus dedos anulares. La pareja se ha casado este fin de semana y ha elegido Ibiza como escenario para un enlace al que solo han asistido sus más allegados.

Desde hacía meses, se venía hablando de la posible boda entre el alemán y la sueca e incluso se confirmaba el lugar pero no la fecha. El secretismo que ha rodeado la boda ha sido tal que ni siquiera los invitados tenían constancia de cómo se iban a desarrollar los acontecimientos.

Michael y Alicia llegaron a la isla el pasado martes procedente de París, en un vuelo regular y cargados de equipaje. Discretos como siempre, la pareja intentó por todos los medios evitar las miradas de curiosos y fotógrafos. Desde el comienzo de su romance, ambos han intentado mantener un perfil bajo, tanto es así que apenas hablan de su vida privada y en alguna ocasión han asegurado que nunca confirmarían si se habían casado. Sin embargo, hay gestos y miradas que hablan por sí mismos, y Alicia no pudo evitar dedicar un tierno beso a su novio cuando ganó el Óscar por su trabajo en «La chica danesa». Fue la confirmación oficial de un romance del que los medios llevaban meses hablando.

Los padres del actor llegaron un  día después procedentes de Dublín, donde residen de manera habitual. Tanto familiares como amigos se han alojado en la zona del puerto de Ibiza, donde han permanecido desde el miércoles hasta el domingo. Los días centrales de la celebración han sido el viernes y el sábado, donde los invitados han podido disfrutar de multitud de actividades gracias al buen tiempo de la isla.

El viernes por la mañana, el cortejo salió desde el puerto de Botafoch a bordo de un catamarán. Una jornada en alta mar donde vimos no solo al futuro novio sino también al modelo vasco Jon Kortajarena, que es muy amigo de la pareja. Tanto Fassbender como Kortajarena presumieron de su escultural anatomía y demostraron que están en plena forma al tirarse de cabeza desde la borda del catamarán.

Por si esto no fuera suficiente, los invitados también pudieron degustar algunas de las delicias gastronómicas ibicencas en uno de los restaurantes  de la isla, Yemanja, situado en plena arena de Cala Jondal, con una amplia carta de arroces, pescados y platos vegetarianos. En todo momento, Vikander y Fassbender estuvieron muy pendientes el uno del uno y se dedicaron gestos de cariño.

Tras la fiesta del viernes, el sábado por fin, la pareja se dio el «sí quiero» en una ceremonia rodeada de fuertes medidas de seguridad. El lugar escogido ha sido una exclusiva finca en el medio de la isla, a salvo de las miradas de curiosos.  El domingo por la mañana, ya convertidos en marido y mujer y luciendo alianzas, Vikander y Fassbender continuaron con la celebración en uno de los clubes de playa de la isla. Un colofón informal para una boda al más puro estilo hippie.

A pesar de ser uno de los enlaces más esperados y comentados de los últimos tiempos, no se ha visto a ningún rostro conocido de Hollywood entre los asistentes, solo familiares y amigos de la pareja, que siempre ha querido hacer de la discreción el adjetivo definitorio de su relación.

El actor, de origen irlandés y nacido en Alemania, y la sueca, se conocieron en una fiesta en el Festival de Cine de Toronto y su romance se consolidó en el rodaje de «La luz entre los océanos». Una historia de película cuya chispa saltó en la pista de baila. Fassbender ha confesado que siempre se consideró un buen bailarín… hasta que la descubrió a ella. Ahora, ya son mucho más que pareja de baile, son pareja para toda la vida.