Exclusiva: El negocio que a los nietos de Franco todavía se les resiste
Los nietos de Franco decidieron poner en venta la casa de su infancia, el edificio donde murió su madre, pero más de un año después no lo han logrado
No vienen buenas noticias para los nietos de Francisco Franco. Esta semana se exhuman los restos del dictador para ser trasladados del valle de los Caídos al cementerio de la colonia de Mingorubio, algo que la familia ha tratado de evitar pero que finalmente no ha sido posible. Pero además de este, LOOK conoce en exclusiva, que hay otro tema que preocupa mucho a los cinco nietos del caudillo.
Se trata de una propiedad, concretamente de la casa familiar situada en la zona noble de Madrid, en la calle Hermanos Becquer, la que les trae por la calle de la amargura. La casa en la que Carmen Franco vio crecer a sus cinco hijos lleva un año y medio en venta a la espera de un comprador que no aparece. Los nietos, de común acuerdo, sacaron al mercado el inmueble completo –son dueños de las siete plantas del edificio y los locales comerciales- propiedad de la familia a los seis meses de fallecer la matriarca. Ayer mismo, con motivo de la inminente exhumación, tres de los nietos se citaron en él para terminar de tomar decisiones respecto de una situación que les afecta directamente.
El edificio en venta es una construcción de siete plantas, más bajo y ático, formado de manera íntegra por viviendas a excepción de los locales comerciales que ocupan la primera planta. Carmen Franco compró uno de ellos y poco a poco fue haciéndose con el resto hasta hacerse con el dominio completo. Vivió allí junto al marqués de Villaverde y todos sus hijos, y allí murió en diciembre del 2017, rodeada de toda su descendencia. Alquiló las viviendas que no utilizaba la familia por una renta que rondaba los 7.000 euros mensuales por piso.
Casa de Carmen Franco en Madrid / Gtres
En mayo de 2018, los herederos sacaron el histórico edificio a la venta por 55 millones de euros, que bajaron a 50 siete meses después. A día de hoy, tal y como ha podido conocer LOOK, ha habido compradores interesados e incluso una venta a punto de cerrarse, pero finalmente resultó fallida.
Actualmente, hay como mínimo dos viviendas alquiladas, una de ella tiene contrato hasta 2021 y la otra finaliza en este mismo año. Y los locales han estado todos alquilados hasta 2018, lo que producía unos beneficios de casi 40.000 euros al mes. Pero hay que tener en cuenta que solo de IBI hay 38.000 mil euros anuales que pagar. Y es que no en vano son 5.896,4 m2 construidos, 114 m2 de patio, y 240 m2 entre terrazas y azotea. Y todo esto situado en una de las mejores zonas de Madrid.