Tres looks innovadores para la vuelta a la oficina que desafían el traje de chaqueta
La oficina no es solo un lugar de trabajo, es tu pasarela diaria, y cada día es una oportunidad para deslumbrar
Este año, el estilo en la oficina se trata de encontrar ese equilibrio sublime entre sofisticación y comodidad
Vestir con estilo para ir a la oficina no tiene por qué convertirse en un reto diario ni robarte esos valiosos minutos de la mañana que tanto aprecias. La clave para lograr un look working impecable y sin esfuerzo reside en tres pilares fundamentales: crear un armario cápsula con prendas básicas de alta calidad, elegir piezas que sean versátiles y atemporales, y añadir un toque de tendencia cada temporada para mantener tus outfits frescos y actuales. ¿El resultado? Conjuntos sofisticados, modernos y, sobre todo, fáciles de armar.
Empecemos por lo esencial: un armario cápsula. Este concepto, más que una moda, es una auténtica salvación para quienes buscan simplificar su día a día sin sacrificar estilo. ¿La fórmula? Invertir en básicos de alta calidad que se conviertan en los cimientos de tu guardarropa. Piezas como una camiseta ajustada, unos pantalones vaqueros bien estructurados y unos zapatos mocasín elegantes son imprescindibles. Estas prendas básicas no solo se combinan con facilidad, sino que también permiten crear infinitas opciones de looks sofisticados, perfectos para cualquier jornada laboral.
Este look es una propuesta de Stradivarius ideal para la oficina.
Por ejemplo, imagina un día en el que optes por un pantalón vaquero de tiro alto en un elegante tono gris. Este tipo de pantalón, con detalles como bolsillos delanteros y pernera recta, es ideal para esos días de entretiempo. Combinado con una camiseta ajustada de cuello subido y manga sisa en color gris, y unos mocasines de tacón con detalle de hebilla, estarás creando un look que destila sofisticación sin esfuerzo. Añade una americana para las mañanas más frescas, y tendrás un conjunto perfecto para la oficina que es tan funcional como impresionante. Este look, además de ser cómodo, es increíblemente versátil y puede adaptarse a diferentes ocasiones según los complementos que elijas.
Ashley Roberts en Londres con un bolso en tonos vibrantes. (Foto:Gtres)
Los accesorios, por supuesto, juegan un papel crucial en la construcción de un look que hable por sí mismo. Un bolso vibrante en un color atrevido, como un rojo intenso o un azul eléctrico, puede ser el toque perfecto para romper con la sobriedad de un conjunto monocromático. Además, las joyas imponentes como gargantillas o collares de eslabones aportan una dosis extra de sofisticación y personalidad a tu atuendo diario, permitiéndote destacar sin esfuerzo.
Vestido midi de cuello solapa con escote pico de Zara.
Otra opción infalible es un vestido blanco con cinturón a contraste. Este tipo de prenda, con detalles especiales como un cuello solapa y mangas acabadas en vuelta, es ideal para resaltar ese bronceado que aún llevas del verano. Además, el blanco es un color que, aunque sencillo, nunca pasa desapercibido en un entorno laboral. Combina este vestido con accesorios únicos, como un bolso de inspiración geométrica y unas bailarinas elegantes, y estarás lista para deslumbrar en cualquier reunión o evento de trabajo.
Total look de punto fino de Mango.
Por último, si buscas una alternativa al clásico traje de chaqueta, te sugerimos un conjunto de dos piezas en punto negro, que emana un aire de elegancia moderna sin necesidad de recurrir a la sastrería tradicional. Con un pantalón de tiro medio y un cárdigan de manga corta con ribetes en contraste, esta opción es ideal para esas reuniones importantes donde quieres causar una impresión duradera, pero sin renunciar a la comodidad.