La reina Isabel le ‘saca partido’ a su residencia navideña
A partir del próximo año, los visitantes a Sandringham tendrán que pagar por aparcar en la zona.
Si hay algo de lo que la reina Isabel no puede quejarse es de su fortuna y de su patrimonio. La monarca británica es una de las más poderosas del mundo y no le faltan ni bienes ni tesorería. Sin embargo, de vez en cuando no viene mal revisar la gestión del patrimonio para ver si se le puede sacar algo más de partido, sobre todo, si quieren mejorarse algunas instalaciones.
La reina Isabel y el duque de Edimburgo en una imagen de archivo / Gtres
Esto es exactamente lo que ha hecho Isabel II con una de sus propiedades más queridas -con permiso del Castillo de Balmoral-. Tal como confirman varios medios británicos, la monarca tiene intención de instalar una serie de modificaciones en lo que respecta a los visitantes que acceden al área de Sandringham debido a la masiva afluencia que ha experimentado la zona.
Será a partir del mes de febrero de 2020 cuando todos aquellos que visiten Sandringham tengan que abonar una tarifa por aparcar que va desde las tres a las siete libras dependiendo del tipo de vehículo. Un dinero cuyo objetivo no es engrosar las arcas de Su Majestad, sino mejorar las instalaciones existentes o trabajar en desarrollos de cara al futuro para poder ofrecer a los visitantes una mayor calidad en cada uno de sus viajes a Norfolk.
La Reina en una imagen de archivo / Gtres
Son más de 500.000 personas las que cada año acceden a la localidad, lo que hace necesario que se trabaje de manera intensiva para que todo se encuentre en perfecto estado. Desde 1908, los jardines de la propiedad son accesibles al público y desde 1977, la casa puede ser visitada por cualquier persona. Fue Eduardo VII quien permitió la entrada a la zona ajardinada a principios de siglo y la reina Isabel al resto del recinto con motivo de su Jubileo de plata.
Por ahora falta algunos detalles en torno al sistema que va a aplicarse y la tarificación, pero sí que se ha confirmado que habrá algunos días como Navidad, cuando hay máxima afluencia de visitas, en los que no se cobre por aparcar y que aquellos que vayan a visitar la residencia de la Reina y compren su entrada también tendrán aparcamiento gratuito.