El heredero en la sombra de Alberto de Mónaco que amenaza la tranquilidad de Charlene
El príncipe Alberto cumple 66 años en un momento en el que su hijo mayor cada vez tiene más presencia pública
Alexandre Grimaldi no tiene derecho al trono, pero sí que tiene intención de ocupar un lugar destacado
De un tiempo a esta parte, el hijo mayor del príncipe Alberto de Mónaco ha ido ganando protagonismo en la esfera pública. Alexandre Grimaldi, nacido del romance del soberano monegasco con la ex azafata togolesa Nicole Coste, no tiene un papel oficial en el Principado, ni siquiera está en la línea sucesoria -porque Alberto nunca se casó con su madre y la legislación monegasca es muy estricta a este respecto-, sin embargo, la relación entre madre e hijo es muy estrecha.
A pesar de que al principio el hijo del príncipe Rainiero y Grace Kelly se mostró algo reacio a reconocer a Alexandre -al igual que ocurrió también con Jazmin Grace-, ambos forman parte de la vida de Alberto y se ocupa no solamente de que no les falte nada, sino también de atenderlos en la esfera personal.
El príncipe Alberto de Mónaco con sus hijos. / Gtres.
Algo que, según algunas fuentes, ‘molesta’ a la princesa Charlene, sobre todo, en el caso de Alexandre, que es el que tiene más cerca. De hecho, la madre del joven criticó duramente a la princesa por su actitud con su hijo y, a pesar de que Alberto de Mónaco se enfadó con ella, las aguas volvieron al tiempo a su cauce. Prueba de ello es que, en ocasiones, la propia Nicole Coste comparte fotografías de encuentros padre e hijo, en los que Jazmin Grace también es bien recibida.
Un heredero sin posibilidad de reinar
Sin embargo, a pesar de la estrecha relación entre Alexandre Grimaldi y el soberano, lo cierto es que el heredero legítimo al trono es el príncipe Jacques. Ni siquiera su hermana Gabriella, que nació antes que él, pero que, por ser mujer, queda relegada todavía a un segundo plano. Si las cosas hubieran sido de otra manera, hablaríamos del príncipe Alexandre como heredero al trono de Mónaco, pero esto es algo que no va a cambiar ya.
El príncipe Alberto de Mónaco en un homenaje a su padre. / Gtres.
No obstante, aunque Alexandre es consciente de que no tiene un papel institucional, ello no significa que no se sienta cercano a las obligaciones del Principado o no quiera contribuir a su buen funcionamiento y su progreso. En una de las entrevistas que ha concedido en los últimos tiempos se mostró muy tajante con aquellos que decían de él que era ilegítimo, puesto que no lo es y aseguró que le encantaría trabajar como embajador global de Mónaco.
Un Grimaldi más
A pesar de que en alguna ocasión ha dicho que no se veía desfilando en una pasarela porque su padre es jefe de Estado, la realidad es que se ha convertido en modelo para su prima, Pauline Ducruet y su firma Alter Designs y también recibe constantes muestras de apoyo en las redes por parte de Camille Gottlieb cuando ha dado importantes pasos en el mundo de la moda, un entorno muy vinculado desde siempre a los Grimaldi. Detalles que dicen mucho del papel que tiene en la familia de su padre y de cómo se está posicionando.
Alexandre Grimaldi con su madre en St. Tropez. / Gtres.
Alexandre está plenamente integrado entre los Grimaldi, sobre todo, con la rama de la princesa Estefanía de Mónaco, de quien dice que es una persona muy divertida y agradable y, además, es su madrina: «Es muy divertida, tiene mucha gracia y los pies en la tierra. Estoy muy unido a ella. En los últimos años, hemos cenado y comido juntos para celebrar mi cumpleaños con mis primos», aseguró en una entrevista a Tatler. Unas palabras que dejan claro que el hijo mayor de Alberto es uno más en la familia, a pesar de sus presuntos desencuentros con la princesa Charlene.
Pese a que la presencia de Alexandre en la vida del príncipe Alberto no amenaza la posición de los hijos menores del soberano y su lugar en la sucesión, lo cierto es que de un tiempo a esta parte, el hijo de Nicole Coste tiene cada vez más presencia pública y no sería extraño que, en el futuro acabara convirtiéndose en una figura fundamental para el Principado.