Rol importante

Ana de Inglaterra, la verdadera ‘salvadora’ del legado de la Reina Isabel

Ver vídeo
  • Andrea Mori
    • Actualizado:

La Casa Windsor no atraviesa su mejor momento. Muchos dirían que el 2021 es casi comparable a aquel 1992 que la Reina Isabel calificó como su ‘annus horribilis’ y, la verdad, es que no irían desencaminados. No ha habido ‘divorcios’ -más allá del de Peter Phillips y su esposa, tampoco grandes desastres que afecten al patrimonio de la Corona -como el gran incendio de Windsor-, pero entre la salida de los duques de Sussex de ‘La Firma’, el escándalo que salpica al príncipe Andrés y la muerte del duque de Edimburgo, la verdad es que la Reina, y la institución en términos generales, vive sus horas más bajas.

La gran diferencia con aquel 1992 es que la monarca ya ha alcanzado una edad en la que la jubilación debería ser algo no opcional, sino imprescindible y que a su lado ya no se encuentra la persona que durante más de siete décadas ha sido su ‘roca’ -y que, por cierto, abandonó la vida pública exactamente a los mismos años que la soberana tiene ahora-. Sin embargo y, a pesar de que la salud le está dando algún que otro quebradero de cabeza, nada hace pensar en que Isabel II vaya a dar un paso atrás. La reina más longeva del Reino Unido, que el próximo año celebrará su Jubileo de Platino, dejará su posición en el mismo momento en el que abandone este mundo -esperemos que sea dentro de varios años-.

La Princesa Ana en un acto de rugby en 2019./Gtres

La Princesa Ana en un acto de rugby en 2019./Gtres

A tenor de los últimos acontecimientos, se ha hablado mucho sobre el relevo de la Corona y los inmediatos planes de la institución una vez falte la Reina y, lo cierto es que, aunque se ha especulado al respecto, no se contempla un salto generacional. Esto es, será el príncipe Carlos quien tome el testigo y tras él, su hijo mayor, Guillermo. El plan del príncipe de Gales es reducir la familia a su mínima expresión, esto es, a los miembros trabajadores más directos, lo que podría acarrear importantes cambios en algunas figuras como los condes de Wessex o la princesa Ana -no tanto en el príncipe Andrés ya que está apartado desde hace más de un año de la estructura de ‘La Firma’ y es más que improbable que vuelva-.

La Princesa Ana en Estonia./Gtres

La Princesa Ana en Estonia./Gtres

Sin embargo, en la actualidad y, a pesar de que se ha intentado fomentar la figura de los duques de Cambridge hasta el extremo para conectar con los más jóvenes y contrarrestar el efecto de la salida de Meghan y Harry, lo cierto es que, para la Corona, el activo más valioso es la princesa Ana.

La única hija del duque de Edimburgo y la Reina Isabel sigue siendo, a sus setenta y un años, la royal más trabajadora de ‘La Firma’. La Princesa Real ha heredado el espíritu de sacrificio de su madre y su compromiso con la Corona es total y absoluto. A esto hay que sumar que fue una de las primeras en pedir que sus hijos no tuvieran un estatus de príncipes, para que pudieran llevar una vida normal.

Reina Isabel

La Princesa Ana durante el Trooping the Colour en Londres./Gtres

En este año complicado, la hija de la Reina Isabel ha completado un total de 368 compromisos, una cifra superior a la de su hermano, el príncipe Carlos, que ha participado en 360. Un detalle que demuestra que es la royal más trabajadora del Reino Unido.

Siempre dispuesta al servicio de Su Majestad, la Princesa se caracteriza por su temperamento discreto y sencillo. Ana huye de la pompa y de los excesos, es fiel a los protocolos, pero no le gusta la ostentación. Algo que queda patente en sus estilismos -algunos de ellos con varias décadas de solera-, así como en el personal a su servicio -un equipo de pocas personas, solo lo imprescindible-.

La reina Isabel y el príncipe Carlos/Gtres

La Reina Isabel junto al príncipe Carlos / Gtres

Ya por debajo de la Princesa Real y el heredero, la Reina Isabel ha participado en este difícil 2021 en 181 compromisos, la mayoría de ellos por videollamada. Por su parte, el príncipe Eduardo ha cumplido con 208 y su esposa 151, mientras que los Cambrigde apenas superan lo0s 300 entre los dos: 232 el príncipe Guillermo y 115 Kate Middleton.A su inmensa capacidad de trabajo se suma la buena consideración que la población general tiene de la Princesa, a quien se considera auténtica heredera de una manera de actuar que se identifica con la Reina y el duque de Edimburgo y que fueron definitorias de la pervivencia de la monarquía. El único inconveniente y lo que la sitúa en una posición desfavorable respecto a los Cambridge tiene que ver con una cuestión generacional. Mientras que Kate y Guillermo conectan bastante bien con las generaciones más jóvenes, Ana está en otra esfera y es difícil que la miren con los mismos ojos. Un ‘escollo’ para la royal, cuya valía y profesionalidad han quedado sobradamente demostradas.

Lo último en Casa Real

Últimas noticias