La tragedia se ceba con los Ortega Mohedano: de la muerte de Rocío a la pena de cárcel de José

Este 8 de julio ha perdido la vida de manera repentina Michu, la ex de José Fernando Ortega Cano y madre de su única hija, Rocío. La andaluza atravesaba varios problemas de corazón e incluso tenía una discapacidad del 36% por esta dolencia. Y es que, una vez más, la tragedia se ha cebado con el clan Ortega Mohedano que, en los últimos 20 años, han vivido un sin fin de momentos dolorosos.

La muerte de Rocío Jurado

El 17 de septiembre del 2004 es una fecha que marcó un antes y un después en el clan. Rocío Jurado convocó a los medios de comunicación en su hogar para confirmar que padecía un cáncer de páncreas. «Me voy mañana a Houston, a la clínica Anderson. El doctor norteamericano Thomas Brown ha visto el informe y ha dicho que el tumor se eliminó en la operación, pero que hay que seguir un tratamiento que durará unas seis semanas», dijo con la voz entrecortada».

Durante dos años, la intérprete de Como Una Ola estuvo luchando contra esta enfermedad que terminó con su vida en la madrugada del 6 de junio del 2006. Fue su hermano, amador Mohedano, el encargado de anunciarlo ante los medios de comunicación. «Ha dejado de respirar a las 5:15 horas. Murió como ella quería, rodeada de los suyos», dijo el ex marido de Rosa Benito.

Su muerte dejó completamente vacíos a sus familiares, a su marido y a sus tres hijos. Además, solo siete años antes de su pérdida, la artista y su marido presentaron a Gloria Camila y a José Fernando, sus hijos adoptivos, a los que fueron a recoger a Colombia.

La entrada en prisión de Ortega Cano

Tras la muerte de Rocío Jurado, el caos reinó en su clan. Rocío Carrasco, su primogénita, se desmarcó hasta día de hoy de sus familiares tras apoyar a su ex, Antonio David Flores, en su separación. A ello se le unió la polémica herencia de la artista que, a día de hoy, sigue generando conflicto y división en la familia. Sin embargo, hubo un episodio que, sin lugar a dudas, cambiaría el rumbo de sus vidas: la entrada en prisión de Ortega Cano en 2014 por homicidio imprudente tras un accidente de tráfico.

Solo dos años antes, en 2012, el padre de Gloria Camila y José Fernando encontró la estabilidad en Ana María Aldón, con la que tuvo un hijo y con la que pasó por el altar. Sin embargo, el hecho de que Rocío Carrasco saliera a la palestra de nuevo para contar su versión sobre la historia familiar, afectó al matrimonio que se separó definitivamente en 2022 tras una década juntos.

Precisamente, Ana María, fue uno de sus mayores apoyos durante el tiempo que el diestro retirado cumplió su condena en el centro penitenciario de Zuera, en Zaragoza.

El ingreso de José Fernando

San Juan de Dios, la Clínica López Ibor o el Instituto Hipócrates de Barcelona son algunos de los centros de desintoxicación por los que José Fernando ha pasado en los últimos diez años coincidiendo con la relación sentimental con Michu.

Sabido es que José Fernando vivió una adolescencia complicada, a la que se le sumaron problemas con la justicia. Todo ello derivó a que ingresara en centros psiquiátricos. De hecho, a día de hoy continúa con tratamientos ya que las autoridades decidieron prolongar su estancia en la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, «una institución de la Iglesia Católica, sin ánimo de lucro, cuya misión es curar y cuidar a las personas más desfavorecidas».

Polémicas televisivas con Rocío Carrasco

Finalmente, otra de las estocadas que ha recibido este clan fue la reaparición televisiva de Rocío Carrasco, la primogénita de Rocío Jurado. Debido a la muerte de su madre, la hija de Pedro Carrasco decidió tomar distancia con su familia. Los problemas con la herencia y el apoyo de su clan a su ex, Antonio David Flores, en su divorcio, separó por completo a la estirpe. De hecho, aunque Rocío en un principio mantenía relación con Chayo, la hija de Amador Mohedano y Rosa Benito, su documental Rocío: contar la verdad para seguir viva, supuso un distanciamiento total entre las primas.

El motivo fue que en esta docuserie, además de contar su versión sobre vida al lado del padre de sus dos hijos, también habló sobre el papel de Amador tras el fallecimiento de su madre. Según contó Carrasco, sus tíos no se portaron del todo bien una vez que su progenitora perdió la vida. Una actitud que, según la que fuera colaboradora televisiva, no era así cuando ‘La Más Grande’ vivía.