Cinco claves para entender el crimen de Daniel Sancho tras conocerse la sentencia
El asesinato de Edwin Arrieta cometido –y confesado- por Daniel Sancho dio la vuelta al mundo y se resolvió en tiempo récord en un país que combina su fama de paraíso para cualquier turista que se precie con la de un infierno para sus presos. Tras conocerse la sentencia que condena a Daniel Sancho a cadena perpetua, recordamos las claves de este crimen mediático.
El asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta Arteaga a manos de un joven español sacudió la crónica de sucesos de nuestro país, pero también la social al conocerse que Daniel Sancho, el asesino confeso, es el hijo del famoso actor Rodolfo Sancho.
Las incógnitas del crimen, unidas al lugar de los hechos y a un móvil que sorprendió tanto a la familia del criminal como a la de la víctima hicieron del conocido en nuestro país como caso de Daniel Sancho una de las noticias del pasado verano.
Daniel Sancho posando en Instagram / Redes sociales
Un tema que ha hecho correr ríos de tinta tanto en España como en Colombia y Tailandia y que ya supone un antes y un después en la crónica negra contemporánea, debido a lo que, para muchos profesionales que llevan semanas analizando lo sucedido en distintos debates televisivos, se resume como un crimen tan inexplicable e inesperado como la actitud del verdugo.
¿Qué unía a Daniel Sancho con su víctima?
Tras varias semanas de investigación, parece haber quedado claro que Edwin Arrieta y Daniel Sancho mantenían una relación. Una especie de noviazgo secreto que ni uno ni otro habían compartido con su entorno y en el que el colombiano pagaba un sueldo de 25.000 euros mensuales al español.
¿Por qué estaban en Tailandia?
Esta es, sin duda, una de las grandes preguntas del caso. Que Daniel fuera visto comprando las armas y los artículos de limpieza con los que primero cometió y después escondió el asesinato de su amante deja en evidencia la premeditación del crimen. Pero cometer un delito de estas características en un país que tiene aprobada la pena capital parece una idea pésima incluso para la mente de un psicópata. ¿Qué llevó a la extraña pareja hasta allí?
Daniel Sancho sin camiseta / Instagram
Teniendo en cuenta las informaciones que ha facilitado la policía tailandesa, las que han conseguido los medios españoles desplazados hasta allí y las propias palabras de Sancho, era el joven español el que, buscando una escapada de ensueño junto a su novia –una joven llamada Laura de la que poco más se sabe- eligió el país asiático. Un viaje del que, al tener noticia, Edwin quiso formar parte, provocando así la furia y los planes de Sancho, que habría trazado entonces su terrible hoja de ruta.
¿Qué desencadenó el asesinato?
Según declaraciones del propio Daniel Sancho, mató a Edwin porque le tenía atrapado en una relación que él no quería. «Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho». Más allá de las propias palabras del asesino confeso, la policía de Tailandia ha hecho público que todo se habría desencadenado cuando, durante su encuentro en el paradisíaco país, el español anunció al colombiano que quería poner punto final a su relación ya que tenía previsto casarse con una mujer. Algo que el doctor no se habría tomado nada bien y que terminó con el fatal desenlace que hoy conocemos.
¿Por qué Daniel Sancho no huyó y se entregó a la policía?
Es, posiblemente, la cuestión que más dudas genera. Al parecer, y después de hablar con la hermana de Edwin, que le contactó a través de Instagram y a la que aseguró que llevaba horas sin saber de su amigo, Daniel acudió a una comisaría a denunciar la desaparición del colombiano. Con lo que no contaba el hijo de Rodolfo Sancho es con que, en ese momento, las autoridades tailandesas ya habían encontrado algunas partes del cuerpo desmembrado de la víctima y estaban investigando el asesinato de quien, hasta ese momento, tenían sin identificar.
Daniel Sancho, detenido en Tailandia / Gtres
La entrada en escena del español no solo dio a la policía el nombre del fallecido sino que también les puso delante al primer (y único) sospechoso del atroz crimen, que pasó de denunciante a investigado tan pronto como se percibieron algunas heridas propias de una pelea en su cuerpo.
La seguridad de Daniel Sancho entrando a una comisaría a denunciar el crimen cometido por él, tal y como confesó poco después, y la razón por la que la policía terminó examinando el cuerpo a un turista que acudía a pedir ayuda son cosas que aún no se han podido explicar.
Los cabos sueltos de la investigación
Las incógnitas por resolver de este polémico asesinato varían en función de a quién se le pregunte ya que, mientras en Tailandia las autoridades locales avanzan con paso seguro y dan declaraciones zanjando según qué cuestiones, en España son muchas las cosas que aún generan dudas. Las tertulias de la mayoría de programas de televisión llevan desde que estalló la noticia contando con criminólogos, forenses y expertos en información de sucesos que no hacen más que mostrar su desconcierto ante las informaciones que en el país asiático se dan por buenas.
Daniel Sancho, detenido en Tailandia / Gtres
Más allá de que todavía quedan partes del cuerpo de la víctima sin localizar –y que la policía da por imposibles ya que fueron presuntamente arrojadas al mar-, del móvil del crimen a la autoría, pasando por la inexplicable actitud del asesino o sus mentiras cuando afirmó que había cenado con la policía en un hotel de lujo son algunas de las grandes incógnitas. Del hecho de que le dejasen mantener su teléfono personal con el que llegó a hablar con programas de televisión cuando ya estaba bajo arresto policial o de su frialdad a la hora de asumir los hechos tampoco hay explicación alguna. Son muchísimas las preguntas sin respuesta de este crimen sin precedentes.