Víctor Soriano, el abogado que salva a políticos, actores y futbolistas de delitos urbanísticos

El abogado Víctor Soriano fundó en 2023 el despacho Soriano i Piqueras, pese a tener plaza asegurada en el despacho internacional Gómez-Acebo & Pombo. En este breve lapso de tiempo ya cuenta con oficinas en Valencia y Madrid y está planteando su expansión a las islas Baleares, ha incorporado a una decena de profesionales y ha sido la única firma legal en España en aparecer en el directorio BestLawyers, que reconoce a los mejores abogados de España, en su primer año de vida. Lo hace en las categorías de derecho administrativo y derecho inmobiliario. El joven abogado, de tan solo 34 años, acaba de enfrentarse al huracán de la polémica por defender a la acusación popular en el caso en que está imputado el fiscal general del Estado mientras ejerce como asesor en el Senado.

Sin embargo, Soriano quiere hacer valer su recorrido para presentarse como uno de los mejores abogados de derecho público y derecho penal administrativo de España. Pese a ser especialista en derecho administrativo y urbanismo y haber ejercido media década como profesor ayudante de derecho administrativo en una universidad valenciana, en la que el letrado sigue en excedencia, Soriano ha enfocado su carrera hacia la litigación penal, hasta convertirse en miembro del selecto grupo de abogados penalistas de los casos más notorios. Pero -avisa Soriano- «los casos que aceptamos de defensa penal deben tener un componente político, administrativo o urbanístico». Soriano es uno de los abogados penalistas de delitos administrativos y urbanísticos de más renombre en el país.

Entre los clientes de este despacho hay futbolistas de una Champions League, actores, empresarios internacionales, promotores y, sobre todo, políticos y funcionarios. Lo explica el abogado, al afirmar que «hacemos una defensa muy técnica de los delitos que tienen un componente de derecho administrativo, como los de corrupción o los urbanísticos, eso puede ser la clave para convencer al juez instructor de que todo se hizo bien y no llegar a juicio».

La forma de ejercer la abogacía de Víctor Soriano es cada vez menos habitual. El letrado reivindica la relación directa con los clientes, el trabajo personal y la excelencia. En Soriano i Piqueras «no hay abogados junior, solo gente experimentada y reconocida», insisten, por decisión personal del propio Soriano, que exige el máximo grado de excelencia en todos los asuntos.

«Hay clientes que llaman pidiendo asesoramiento que no les podemos ofrecer y los redirigimos a otras firmas, porque nosotros tenemos claro cuáles son los asuntos que queremos llevar y sólo aceptamos aquellos en los que pensamos que somos los mejores abogados para el cliente», manifiesta el letrado Víctor Soriano. Por eso han creado una firma alternativa legal, bajo la marca Metrópolis, que cuenta con una oficina en Valencia pero interviene en asuntos en toda España a través de una red de colaboradores, a la que derivan el trabajo del día a día de sus clientes, sobre todo las empresas o los particulares, para poder dedicarse en exclusiva a las áreas que dominan: el derecho administrativo, inmobiliario y urbanístico, y la defensa penal de delitos administrativos, fiscales, urbanísticos y de corrupción.

A Víctor Soriano le inquieta «que se vincule el despacho o mi práctica profesional con una formación política o un punto de vista ideológico» y afirma que «la defensa letrada en un procedimiento penal no entiende de ideologías». Soriano hace gala de haber defendido a cargos y administraciones de todos los colores políticos. «Nunca rechazaremos un asunto por la ideología del cliente, ni por el partido político del que forme parte», manifiesta el letrado que, no obstante, reconoce que se le «visibiliza» como abogado del PP en variados casos de corrupción, como en el que pronto se juzgará al hermano del expresidente valenciano Ximo Puig.

En el despacho Soriano i Piqueras enumeran la lista de casos relevantes cada vez que se les tacha de ser los abogados del PP: «hemos participado en operaciones urbanísticas e inmobiliarias de primer nivel en todo el país » o, remarcando la especialización de la firma en derecho penal administrativo y urbanístico, insisten en que «somos los abogados de la defensa en los casos de delito urbanístico más relevantes que existen actualmente en España».

Entre ellos, Soriano colecciona los casos de delito urbanístico en los que los clientes más adinerados de Ibiza acuden a su despacho, como el caso del futbolista Marco Borriello o un buen puñado de asuntos más en la isla blanca. «Para nosotros todos los clientes son iguales, pero hay casos en los que hay que gestionar la repercusión pública del asunto para evitar que el cliente tenga que soportar la pena de telediario», explica el abogado.

El archipiélago balear es «el próximo reto» para la firma Soriano i Piqueras, explican desde el despacho, pero sin olvidar que el enfoque del despacho es asumir solo aquellos encargos que los letrados pueden realizar personalmente. Para ello, Soriano ha confiado en un equipo de primer nivel, con la incorporación de José Luis Pantoja, a los mandos de la oficina de Madrid, y la confianza en María Ángeles López y Enrique Enguix en Valencia. Soriano, mientras tanto, continúa «subido en un avión» pero revisando los autos del próximo caso.