La importancia de Sergio Ramos en el Real Madrid es máxima. El capitán lo es todo para el conjunto blanco tanto lo emocional como en lo deportivo. Si el central es el líder que guía al equipo con su mentalidad ganadora, también lo hace una vez comienza el partido siendo decisivo en las dos áreas.
Ante el Eibar, Sergio Ramos exhibió su feeling con el Alfredo di Stéfano. El ‘4’ anotó el primero gol de la historia del estadio y en el reinicio de la Liga con este escenario como nueva casa blanca volvió a mojar. Y es que ver al capitán celebrar goles se ha convertido en habitual porque ya lo ha hecho en ocho ocasiones esta temporada.
Tras rematar la asistencia de Hazard, Ramos anotaba el segundo gol madridista en el partido y el sexto en su cuenta particular en Liga. Un gol que además le permite igualar a Ronald Koeman como el defensa más goleador de la Liga con 67 tantos.
Y es que tan sólo Benzema ha marcado más goles esta temporada que un Sergio Ramos que ha iniciado el regreso de la competición como un tiro. El de Camas, que fue sustituido en el minuto 61 con una pequeña sobrecarga, firmó unos minutos sensacionales con un acierto de pase del 93%, todos sus duelos aéreos ganados (3/3), dos intercepciones, tres despejes y sin que ningún atacante del Eibar haya sido capaz de regatearle.
Ramos atraviesa un buen momento también en lo personal, donde espera el nacimiento de su cuarto hijo. Precisamente al bebé que está en camino le dedicó el gol llevándose el dedo a la boca a modo de chupete.
«Una simple molestia»
«Era una simple molestia, una sobrecarga y por precaución. Contento por volver, por los tres puntos, porque se reanude un poco todo. Ha sido un poco raro para todo el mundo, después de una desgracia tan grande», dijo tras el partido, mandando un mensaje de ánimo a todo el mundo, y explicando su cambio.
Ramos celebró la vuelta del fútbol tras el largo parón por el coronavirus. «Estamos aquí, que vuelva el fútbol es una alegría para todo el país, y que se reactive también un poco todo el tema de las empresas para la economía del país», apuntó.
«Nos hemos encontrado bien. Es normal que todavía no se haya hecho un partido espléndido. No se puede estar los 90 minutos a la misma intensidad que hemos desarrollado los 45 primeros. No nos quedaba más remedio, hemos estado menos intensos y hemos dado más facilidades. Nos sirve para aprender. El equipo aunque esté bien, no puedes aguantar los 90 minutos, pero en líneas generales bien. Nos viene muy bien anímicamente estos tres puntos», terminó.