Brahim Díaz es uno de los chicos de moda en el mundo del fútbol. El malagueño brilla en el Milan, donde se ha convertido a sus 22 años en uno de los líderes del conjunto rossonero y ha sido convocado por la selección española absoluta para los trascendentales duelos ante Grecia y Suecia, donde el combinado nacional está obligado a ganar si quiere clasificarse sin necesidad de jugar una peligrosa repesca en el mes de marzo. Mientras, el Real Madrid, que tiene al español en propiedad, le observa de cerca y debate si la próxima temporada ya está listo para regresar al conjunto blanco o le permitirá a la entidad italiana disfrutar un año más de su calidad. La entidad madridista puede romper la cesión sin penalización, aunque necesita el sí del jugador.
El Real Madrid y el Milan llegaron el verano pasado a un acuerdo en el que se recogía que Brahim jugaría dos temporadas en calidad de cedido en el club italiano y que no se incluía ninguna opción de compra para los rossonero. No obstante, los blancos pueden poner punto final a la cesión tras la primera temporada sin la obligación de pagar una penalización, aunque para ello la entidad madridista tendrá que tener el sí de un jugador que es feliz en el club de San Siro, donde se siente tremendamente importante.
Real Madrid y Milan mantienen una excelente relación, por lo que los blancos no harán ningún movimiento si no están convencidos de que Brahim podría tener un papel importante dentro de la plantilla madridista y si no tienen confirmado el deseo del jugador de volver a la capital de España un año antes de lo previsto. De no ser así, el malagueño volverá a jugar un año más en la Serie A y será a la siguiente temporada cuando regrese al Santiago Bernabéu.
Ancelotti lo quiere para la próxima temporada
El Real Madrid sabe que esta temporada Brahim ya habría tenido un papel protagonista dentro del equipo de Carlo Ancelotti, pero el overbooking que vivió la plantilla el pasado verano, lo que obligó a dar salida a varios futbolistas, le llevó a hacer las maletas. El malagueño es uno de los pocos jugadores que sí recibieron propuestas para salir, ya que otros no despertaron el interés de ningún club. Ante esta situación se decidió que lo mejor para todas las partes era que terminase de crecer en el Milan, aunque la entidad madridista tiene claro que el andaluz tiene condiciones de sobra para triunfar en el 13 veces campeón de Europa. Es por este motivo por el que se han mostrado inflexibles a la hora de incluir cualquier opción de compra, a pesar de que los italianos estarían encantados de hacerse con sus servicios en propiedad.