El Real Madrid, que espera la llamada del PSG para hablar de Mbappé, está dispuesto a incluir a Mendy en la operación para rebajar el precio de su traspaso. En el club blanco no cierran ni mucho menos las puertas a hablar con el Paris Saint-Germain sobre un posible traspaso de Mbappé este mismo verano, pero en la cúpula de Valdebebas tienen muy claro que no están dispuestos a llegar a los 200 millones que ofrecieron por el delantero el 31 de agosto de 2021, una oferta que ni siquiera fue respondida por el PSG en pleno pulso por el caso Mbappé.
La inclusión de Mendy como parte de la operación de traspaso de Mbappé puede ser una fórmula que encaje no sólo al Real Madrid, sino también al PSG, que busca afrancesar el equipo para conseguir una mayor conexión no sólo con los aficionados parisinos sino con el resto de los fans de toda Francia. Mendy encaja en las necesidades deportivas del PSG, que necesita apuntalar todas las lineas, pero el club parisino preferiría incluir en la operación Mbappé a uno de los dos centrocampistas franceses que les birló el Real Madrid en los dos últimos veranos: Camavinga y Tchouaméni
Mbappé, el día después de la noticia publicada por L’Equipe, se pasó la jornada entre el comunicado para señalar al PSG por la filtración de su decisión de no ejecutar su cláusula de renovación y sus declaraciones para asegurar que jugará en París la próxima temporada. Aunque pocos le creen ya, ha dejado claro que no quiere renovar pero prefiere irse gratis en 2024 antes que este verano, porque perdería una suculenta prima de fichaje superior a los 100 millones de euros.
En este escenario enredado y complejo el Real Madrid ha aprendido la lección de lo que ocurrió en los dos últimos veranos. No se fía de Mbappé y todavía menos del PSG, así que el club blanco no hará movimientos hasta que los parisinos descuelguen el teléfono ni hará locuras para fichar a un jugador que les enamora. Como le dijo Florentino Pérez a un aficionado, «Mbappé, sí, pero no este año».