Noche grande en el Bernabéu. El partido más especial de la capital mide a los dos mejores equipos de España. Real Madrid y Atlético se ven las caras en el feudo madridista con objetivos dispares, pero con la convicción de que Chamartín vivirá 90 minutos llenos de emociones. Los de Carlo Ancelotti son líderes y tiene la posibilidad de dar un golpe encima de la mesa del campeonato si suman los tres puntos, mientras que los de Simeone están viviendo un curso irregular, pero tras la montaña rusa de emociones que fue Oporto y que acabó que con los rojiblancos clasificados para los octavos de final de la Champions, tratarán de llevar la buena onda al campeonato nacional, donde hasta el momento les está costando más de lo esperado.
El Real Madrid busca la décima victoria consecutiva ante el Atlético de Madrid. Los de Ancelotti han encontrado una buena dinámica que les ha permitido conseguir un colchón de puntos en la Liga y clasificarse como primeros de grupos a los octavos de final de la Champions. Si los blancos suman la victoria, aventajarán en 13 puntos a los rojiblancos y darán un paso tremendamente importante en la lucha por el campeonato nacional.
Ancelotti ha encontrado su equipo y lo está exprimiendo al máximo. Y la verdad es que Por el momento le está funcionando. El cansancio no aparece y los blancos viven instalados en la victoria. Ante el Atlético de Madrid el italiano no hará rotaciones. Courtois será el portero, mientras que el belga estará defendido por Carvajal, Militao, Alaba y Mendy. En el corte, dando equilibrio al juego madridista, actuará un Casemiro que si ve amarilla no podrá jugar contra el Cádiz la próxima jornada, mientras que la creación del juego madridista será cosa de Modric y Kroos. Arriba, Rodrygo formará por la derecha y Vinicius por la izquierda, mientras que la gran duda está en quién será la principal referencia ofensiva. Benzema ha entrado en la lista, pero sólo jugará si se encuentra al cien por cien. Si no es así, repetirá Jovic.
Con la moral por las nubes
El sábado pasado el Atlético de Madrid veía como Kubo decantaba a favor del Mallorca un duelo que les dejaba muy tocados en la Liga, pero más todavía en lo anímico. Dos días después, se montaban en un avión con dirección a Oporto donde los de Simeone iban a disputar un partido en el que no dependían de ellos mismos para estar en octavos de final de la Champions. Durante muchos minutos no sólo estuvieron fuera de la máxima competición continental, sino que ni siquiera estaban clasificados para para la Europa League. Sufrieron, mucho, pero en el minuto 56 un gol de Griezmann devolvía a la vida a un equipo que terminó logrando el objetivo y se llenó de moral para afrontar un derbi en el que están obligados a ganar si no quieren decir adiós a muchas de las opciones de repetir título.
Simeone ha podido finalmente recuperar a Luis Suárez para este encuentro, cuya lesión era menos importante de lo que se pensaba, pero no parece que el uruguayo vaya a ser titular. El magnífico estado de forma de Correa y de Cunha les sitúan por delante del pistolero, y teniendo en cuenta que Carrasco y Griezmann son fijos y que por detrás está Joao llamando a la puerta, todo hace indicar que el actual máximo goleador del equipo no será de la partida.
Más problemas tiene Simeone en defensa. Trippier, Savic y Vrsaljko son bajas seguras, mientras que Giménez, que ha entrenado toda la semana al margen, tiene escasísimas posibilidades de llegar a tiempo. Por otro lado, vuelve Felipe, que no pudo jugar por sanción en Oporto, y todo hace indicar que el francés Kondogbia repetirá como titular tras su gran partido en Do Dragao.
Pita Mateu y vuelve el público
Mateu Lahoz será el encargado de dirigir el duelo en el que el equipo de Carlo Ancelotti puede dar un golpe a la Liga. En el VAR estará Iglesias Villanueva. El valenciano ya pitó el derbi disputado entre Real Madrid y Atlético la pasada temporada en Valdebebas en el que el conjunto madridista venció (2-0) a los rojiblancos.
También hay que destacar que el público vuelve a un derbi tras una temporada con las gradas vacías por culpa del coronavirus. El estadio Santiago Bernabéu se espera que tenga una gran entrada, repitiendo la atmósfera que se vivió el pasado martes ante el Inter de Milán en la Champions.
