Un Liverpool herido en su orgullo y con ganas de venganza después de las últimas tres tragedias ante el Real Madrid. La final de París fue una cornada con doble trayectoria para los reds que siguen en cuidados intensivos después del partido del Parque de los Príncipes. Porque, a pesar de las dos últimas victorias ante Everton y Newcastle, los números dicen que este es el peor Liverpool de la era de un Jürgen Klopp que por primera vez desde 2015 ha sido puesto en duda por la opinión pública.
La cuesta abajo del Liverpool de la 2022-2023 comenzó el pasado 29 de mayo en París. Tras la derrota en París se confirmó la marcha de Sadio Mané al Bayern de Múnich y los 100 millones depositados por Darwin Núñez aún no se han convertido en resultados positivos. Pese a que comenzaron levantando el primer título de la temporada ante el Manchester City, poco a poco el equipo fue diluyéndose hasta firmar la peor primera mitad de temporada de los últimos años.
Y es que después de los 22 primeros partidos en la Premier League, el Liverpool ocupa la octava posición (tiene dos partidos menos) con 35 puntos. Pero hay más dígitos que delatan a los de Klopp. Sumidos en el mes de febrero, el equipo red sólo acumula 38 goles a favor y ha encajado 28 tantos. Unos números que están lejos de los 61 que había anotado en Premier a estas alturas de la pasada temporada o los 18 que había encajado. Los números son claros: el año pasado marcaba casi el doble y encajaba mucho menos.
Con estos datos en la mano se entiende el desmorone de un Liverpool que empeora todos los números de la era Klopp. Hace dos temporadas había anotado 43 y encajado 25, por los 52 tantos que acumulaba y sólo 14 recibidos en el 2020 en el que acabó ganado la Premier. Unos dígitos similares firmo en las anteriores tres. Para ver tales guarismos, hay que retroceder a la temporada 2015-2016, fecha en la que asumió el entrenador alemán.
Mejora poco a poco
Después de una trágica primera parte de la temporada, el Liverpool parece que ve la luz al final del túnel. La enfermería poco a poco se va vaciando y en estos momentos las únicos jugadores lesionados son Konaté y Thiago. Klopp ha recuperado a jugadores para la causa y las dos últimas victorias ante Everton y Newcastle con la portería a cero han hecho recuperar la sonrisa a una parte de Liverpool que quiere volver a creer en una clasificación para la Champions.
Después de dos alegrías consecutivas, el Real Madrid será el termómetro para calibrar la temperatura de un equipo que ha tenido muchos bajones en una temporada aciaga en la que en esta eliminatoria se juega todo a una carta. La máxima competición europea es la tabla de salvación para un equipo que tiene una cuenta pendiente con Europa.
