Ricardo de Burgos Bengoetxea vuelve a cruzarse en el camino del Real Madrid. El colegiado bilbaíno será quien estará en el VAR en el duelo frente al Espanyol, suponiendo un peligro para los blancos, a tenor de los precedentes. Sin ir más lejos, el pasado curso estuvo inmerso en varias polémicas en los encuentros de los madridistas, tanto desde el campo como al frente de la tecnología.
El historial de De Burgos Bengoetxea contra el Real Madrid es bastante amplio. Desde aquella expulsión a Cristiano Ronaldo en el Camp Nou en una Supercopa de España, hasta el último partido de los blancos en el que tuvo algo que ver. Fue ante el Cádiz el pasado curso, desde el VAR, donde obvio un penalti de Fali a Joselu.
Sin ir más lejos, el equipo madridista tiene con De Burgos uno de los peores porcentajes de victorias en las últimas temporadas. En los últimos ocho encuentros del equipo en los que ha sido árbitro de campo, los madridistas suman sólo tres triunfos. El balance no puede ser peor, con otras tres derrotas y dos empates.
La última polémica, más allá del encuentro ante el Cádiz en el que fue árbitro de VAR y pasó por alto una falta de Fali a Joselu en el área que le impidió rematar, fue en el encuentro en el que el Real Madrid visitaba el Pizjuán. Allí, sacó de quicio a Ancelotti, que llegó a decirle que no le tocara, tras recriminarle una decisión.
Ese encuentro fue de lo más polémico, por culpa del propio colegiado. Y el conjunto blanco no pudo más que sacar un empate. Un dudoso fuera de juego de Bellingham invalidó un tanto de Valverde, aunque lo peor llegó después. Dejó seguir tras un choque entre Rüdiger y Ocampos próximo al área del Real Madrid y, cuando vio que los blancos montaban la contra, pitó falta del alemán. La jugada acabó en gol de Bellingham, puesto que ni Rodrygo ni él se dieron cuenta de que el árbitro había parado el juego. Pero el tanto no subió al marcador.
El conjunto blanco pudo haberse puesto 0-2 en aquel encuentro, en el que terminaría empatando a uno después de la polémica arbitral. Ancelotti acabó muy enfadado con el colegiado, al que llegó a gritarle «¡no me toques!», en un momento en el que el vasco se acercó para hablar con él, tras una réplica del italiano. Un comportamiento que no suele ser nada habitual en el técnico y que refleja su sentir respecto al trencilla.
Expulsó a Vinicius tras los insultos racistas de Mestalla
Pero si hay un partido clavado en la retina del aficionado madridista, ese es el Valencia-Real Madrid de la temporada 22-23, en el que Vinicius sufrió insultos racistas. El brasileño acabó siendo expulsado después de que a De Burgos le sesgaran las imágenes desde el VAR, en una tangana en la que se defendió de los agarrones y agresiones de Mamardashvili y Hugo Duro.
Antes de aquella polémica, que provocó el despido del mayor de los hermanos Iglesias Villanueva –que estaba en el VAR– y provocó una revolución en el CTA, De Burgos Bengoetxea había obviado varias polémicas. Sin ir más lejos, Vinicius había sufrido antes un penalti claro que pasaron por alto.
Burgos Bengoetxea en el VAR, Munuera Montero en el césped
Al que asistirá Ricardo de Burgos Bengoetxea será a Jose Luis Munuera Montero. El jienense es uno de los colegiados que menos ha pitado al Real Madrid en los últimos años. Todo, a pesar de estar considerado como uno de los mejores de Primera División. El balance del conjunto blanco es de 13 victorias, un empate y dos derrotas. La última, en el único Clásico que ha dirigido.
Será la primera vez esta temporada en la que el colegiado andaluz arbitra al Real Madrid. La pasada campaña lo hizo en dos ocasiones, con triunfos ante Las Palmas y Real Sociedad. Precisamente, frente a los donostiarras, hace varios años, fue protagonista de una acción, puesto que cuando consultó sobre un posible penalti sobre Vinicius, desde el VAR le contestaron «todo OK, José Luis», cuando en realidad, sí que era pena máxima.