“No se quiere mover nadie y tenemos un problema”. El Real Madrid está preocupado por esta situación. Zidane en estos momentos tiene en su plantilla a 25 jugadores más Altube, que hace las labores de tercer portero, y todos ellos, salvo Areola, que finaliza su préstamo una vez concluya la presente temporada, tienen contrato en vigor. Por ello, alguno deberá salir antes de dejar entrar y, por el momento, casi ningún futbolista está por la labor de hacer las maletas.
De hecho, el único que vería con mejores ojos cambiar de club es James Rodríguez, pero tampoco quiere hacer mudanza y ansía seguir en Madrid, aunque vistiendo de rojiblanco. Pero para fichar por el Atlético se tiene que rebajar su sueldo, algo que en estos momentos no ve claro. Aunque el verano es largo y si su situación no cambia, algo que parece complicado mientras Zidane siga siendo el entrenador, podría empezar a ceder sobre su salario. Luego, tiene otras ofertas llegadas desde la Premier, pero el colombiano no quiere salir de la capital de España, donde está muy asentado.
En una situación parecida está Brahim. El Real Madrid quiere que el joven jugador malagueño salga cedido para contar con una regularidad que ahora mismo no tiene, pero él tampoco lo termina de ver con buenos ojos. Tanto el jugador como su entorno están seguros de que puede triunfar de blanco y, aunque cuenta con la confianza de Zidane, la entidad madridista le busca un préstamo. Ofertas no le faltan y el Betis, entre otros, están muy pendientes de su situación.
Otros dos jugadores que ya han comunicado al club que quieren seguir son Bale y Mariano. El galés, que acaba contrato en 2022, tiene decidido seguir una temporada más en el Real Madrid, mientras que el canterano, al igual que en las dos últimas temporadas, sigue convencido de que podrá tener su oportunidad a las órdenes de Zidane.
Marcelo y Modric también siguen
Dos de los pesos pesados, como Marcelo y Luka Modric también continúan. Ambos ya le han transmitido su deseo al club, que lo acepta sin problemas. Por lo tanto y ante esta situación, el club deberá dar salida como mínimo a dos jugadores para poder dejar sitio a Odegaard y Achraf, los dos cedidos que retornarán salvo sorpresa, ya que el hueco que va a dejar Areola será ocupado por Lunin, otro de los que vuelve tras préstamo. Pero para que llegue el ansiado central y, quién sabe, si alguna otra sorpresa, deberá salir alguno más. Aunque todos piensan que como en Madrid y en el Madrid en ningún sitio.
