El Real Madrid quiere que Odegaard recale esta temporada en el club y Modric quiere seguir un año más vistiendo de blanco. ¿Cuál es problema? Ninguno. En la entidad madridista no ven ningún conflicto ante situación, ya que los técnicos consideran que ambos jugadores son perfectamente compatibles y que, un año juntos, le puede venir muy bien al noruego.
Ante la situación actual, el Real Madrid tiene claro que no forzará la salida de ninguno de sus futbolistas. Por ello, Modric, que se ha ganado el derecho a decidir su futuro, seguirá en el Santiago Bernabéu un año más, como mínimo. Y al mismo tiempo, podrá ejercer de hermano mayor’ de Odegaard, que encontrará tener en su figura un ejemplo perfecto a seguir.
En el Real Madrid están convencidos de que ambos jugadores se harán mejores. Por un lado, Martin, que tiene el temor de no contar con continuidad si finalmente termina regresando, podrá aprender de Modric. Una figura única. Todo un Balón de Oro. Luka, un hombre con peso dentro del vestuario, tendrá el objetivo de arropar a Odegaard y guiarle en su primer año como jugador del primer equipo madridista. El noruego es tremendamente profesional, pero el croata le podrá ayudar para que sea capaz de superar los diferentes obstáculos que se plantean en el día a día a cualquier jugador madridista.
Por otro lado, Modric, en la que puede ser su última temporada en el Real Madrid, hay que recordar que tiene contrato hasta 2021, puede tener la oportunidad de ceder el testigo al que puede ser su sucesor. En el club ven con muy buenos ojos esta oportunidad y creen que a Odegaard le vendrá muy bien tener a Luka como ejemplo durante su primer año en el Santiago Bernabéu, mientras que el ‘10’ podrá dosificar sus apariciones y tendrá el aliciente de ayudar a un joven lleno de cualidades, pero con cosas por pulir. Maestro y alumno mano a mano durante un año es una idea que encajar por Valdebebas.