Se acabó el debate: estamos ante el mejor jugador del mundo. Mbappé dio un recital en el estadio Santiago Bernabéu. Venía siendo el mejor jugador del equipo en los últimos duelos, pero contra Las Palmas lo acompañó de goles. Muchos goles. Y eso que entre Figueroa Vázquez, el mismo que estaba en el VAR pitando un penaltito en contra del Leganés, repitió contra el Real Madrid y decidió entrar en acción para, con el beneplácito de Quintero González, anular el tercer gol del francés. Pero poco le iba a importar, puesto que iba a seguir perforando las redes insulares.
Tras el susto de Las Palmas, que antes del primer minuto ya ganaba 0-1, Mbappé comenzó a poner orden. Era el mejor jugador sobre el terreno de juego y se encontró con un socio con el que se entiende a las mil maravillas: Rodrygo Goes. Entre ambos, empezaron a dar la vuelta al duelo. Primero, con un gol desde los once metros. Trauma desbloqueado. Tras fallar sus dos últimos lanzamientos desde los once metros, ante Liverpool y Athletic, volvió a ver portería frente a Las Palmas.
Todavía tuvo tiempo antes del descanso para hacer la segunda diana, el tercero de los blancos, con un disparo de primeras que terminó dentro de la portería de Las Palmas. En la segunda parte no vio portería, pero poco importó. Su exhibición fue espectacular.
Respeten a Rodrygo
Se suele decir a la ligera eso de que Rodrygo debe salir. «El año que viene se venderá a Rodrygo», también se escucha mucho entre los supuestos entendidos. Pero la realidad es que el brasileño siempre está, siempre suma y, cuando le dejan y le ponen en su posición, suele marcar la diferencia. Lo hizo contra Las Palmas, donde fue el mejor socio de Mbappé.
Rodrygo provocó un penalti que transformó Mbappé. Le asistió en el segundo del galo, el tercero del Real Madrid. Y, en el segundo tiempo, hizo su diana, la que tantísimo merecía. No obstante, lo más importante fue lo que aportó y su entendimiento con Kylian.
Rodrygo Goes es un jugador capital para Carlo Ancelotti por ese trabajo silencioso que hace dentro del terreno de juego, pero que también le desgasta notablemente en lo físico. De los atacantes del Real Madrid, es el que más kilómetros recorre hacia atrás para defender, ya que Vinicius Junior y Kylian Mbappé, por orden del italiano o no, parece que están liberados de esa faceta. Obviamente, esto le lastra y le quita lucidez ofensiva, pero el preparador trasalpino lo valora enormemente.
También valora Ancelotti su facilidad para adaptarse a cualquier posición. Sí, Rodrygo es de izquierdas y no hablamos de política. Es feliz cuando cae por el costado zurdo, pero también sabe que para que eso suceda no tiene que coincidir en el espacio-tiempo del terreno de juego Mbappé y Vinicius. Complicado. Ante Las Palmas sucedió y disfrutó.
El regreso de Alaba
El regreso de Alaba fue la gran noticia del partido, además de la victoria y el liderato. El austriaco volvió a un terreno de juego 399 días después. Jugó los minutos finales, pero suficiente para volverse a sentir futbolista. Ahora, poco a poco, deberá adquirir el ritmo competitivo para volver a ser uno de los jefes de la defensa.
Las notas del Real Madrid:
- Courtois: 6
- Lucas Vázquez: 6
- Asencio: 7
- Rüdiger: 7
- Fran García: 8
- Valverde: 8
- Ceballos: 9
- Bellingham: 8
- Brahim: 7
- Rodrygo: 8
- Mbappé: 9
- Alaba: 7
- Arda Güler: 6
- Chema: 6
- Endrick: 6
- Lorenzo Aguado: 6
- Ancelotti: 7