La Comisión Antiviolencia ha acordado este lunes, tras los lamentables incidentes en el derbi madrileño, modificar el protocolo de actuación para restablecer la normalidad en competiciones, pruebas o espectáculos deportivos, y reforzar la comunicación entre el árbitro y el coordinador de seguridad de los clubes, con la presencia de un miembro de las Fuerzas de Seguridad a pie de campo.
La medida ha sido impuesta después de la suspensión durante unos 20 minutos del derbi madrileño entre Atlético de Madrid y Real Madrid por lanzamiento mecheros y botellas por parte de ultras hacia Courtois en busca de «una mayor eficacia» y el representante de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se ubicará en el campo en una zona próxima a los banquillos, según informó Antiviolencia.
La ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte establece en su artículo 15.2 que la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte establecerá un protocolo de actuación que comprenderá las medidas orientadas al restablecimiento de la normalidad, proporcionadas a las circunstancias de cada caso, con la finalidad de lograr la terminación del encuentro o prueba en condiciones que garanticen la seguridad y el orden público.
La Comisión se reunió este lunes y condenó los hechos ocurridos en el estadio Metropolitano, donde el partido se suspendió por una lluvia de mecheros a la zona donde estaba el portero del Real Madrid, pero no propuso ninguna sanción por los hechos al estar a la espera de recabar información sobre los mismos.
Otras sanciones en la Liga
Antiviolencia, que declaró de alto riesgo los próximos encuentros de Liga Valladolid-Rayo Vallecano y Sevilla-Betis, sí propuso sanción para los autores de lanzamiento de objetos al campo de Balaídos, al final del partido Celta-Valladolid, con seis meses de prohibición de acceso a recintos deportivos y 3.001 euros de multa. Se trata de tres aficionados que lanzaron objetos contundentes y bengalas al final del partido Celta de Vigo-Valladolid hacia la zona en la que policías acompañaban a los seguidores visitantes en su salida del campo.
Entre sus otras propuestas de sanción figuran una multa de 3.001 a la UD Las Palmas por deficiencias en las medidas de permanencia y desalojo de espectadores al no impedir que cinco aficionados invadieran el terreno de juego una vez acabado el encuentro y mientras permanecían los jugadores en el mismo con ocasión del partido Las Palmas-Sevilla el pasado 16 de agosto.
También doce meses de prohibición de acceso y una multa de 4.000 euros para un aficionado que, con síntomas de embriaguez, agredió a un policía en el partido de la Liga de Campeones Real Madrid-Stuttgart, nueve meses de prohibición de acceso y multa de 3.500 a un seguidor del Getafe que arrancó un asiento del campo en el choque contra el Leganés y seis meses de prohibición y 3.001 de multa a nueve personas que participaron activamente en un enfrentamiento entre aficiones con motivo del Mérida-Recreativo de Huelva