El Clásico terminó con varios jugadores del Real Madrid tocados tras 120 minutos de máxima intensidad. Algunos fueron sustituidos por precaución antes de que se cumpliese el tiempo reglamentario, mientras que otros llegaron al final del encuentro en las lonas. Los fisioterapeutas blancos se tuvieron que emplear a fondo hasta altas horas de la madrugada en la noche del miércoles.
Carlo Ancelotti recibía esta mañana en el desayuno del hotel Hilton Riyadh un parte de guerra que incluía a Vinicius, Fede Valverde, Benzema o Carvajal. «Era lo normal. Todos tienen algo», inciden desde el club blanco tras un esfuerzo global de más de 140 kilómetros recorridos en el partido contra el Barça. Vinicius, sin ir más lejos, tuvo que ser masajeado durante el descanso de la prórroga por problemas en los gemelos.
Los fisioterapeutas blancos no pararon en toda la mañana en busca de recuperar en plenitud a algunos efectivos antes del entrenamiento de este jueves a las 18:00 horas en el Mrsool Park de Riah. Este estadio, escenario del Al Nassr Football Club, acogió a los blancos en una sesión que fue bastante distendida. Se hizo trabajo táctico y se corrigieron algunos errores posicionales que hubo en el partido ante el Barça.
No entrenaron al mismo ritmo que el resto ni Vinicius ni Fede Valverde –los héroes del tercer gol madridista–, al mismo tiempo que Alaba se probó para ver si habrá superado sus problemas musculares de cara al partido del domingo. La sesión apenas duró una hora y el Real Madrid se marchó a descansar y recuperar de todo el esfuerzo del miércoles.
Dentro del equipo blanco no hay preferencias en cuanto a los rivales. Tanto Athletic como Atlético obligarán a una enorme exigencia para el partido del domingo, pero confían en que los jóvenes puedan recuperarse para este partido. Por el momento, Ancelotti sabe que este día de descanso extra con respecto a sus rivales es agua bendita.