Carlos Henrique Casemiro, leyenda del Real Madrid y capital en la segunda edad dorada del club blanco, se ha convertido en nuevo embajador de Save The Children. El brasileño, que creció en una familia humilde, sabe que los niños necesitan ayuda. Por ello, pasó una tarde con jóvenes en el madrileño barrio de Vallecas, con los que jugó y compartió momentos que no olvidará.
“Yo he tenido una infancia muy complicada, así que para mí es un honor ayudar y sé cómo de importante es hacerlo. Save The Children sabe que puede contar conmigo”, contó Casemiro en su visita. El futbolista visitó uno de los centros de atención a la infancia de la organización, acompañado de su director general, Andrés Conde.
Allí se encontró con muchos de los 119 niños y niñas, procedentes de 72 familias con bajos recursos y riesgo de exclusión social, que acuden a este recurso, en el que se ofrecen actividades de refuerzo educativo y de ocio para menores de todas las franjas de edad.
El lugar es un espacio seguro para crecer en un barrio con escasa dotación de parques y zonas de convivencia. Hay grupos de crianza para familias con bebés, grupos de madres y padres, aulas para los más pequeños (de 0 a 6 años), servicio de atención psicológica, talleres de alimentación saludable y formación en alfabetización digital y empleo para que los progenitores, y por tanto sus hijos e hijas, puedan tener opciones laborales.
“La presencia aquí de referentes sociales como Casemiro es muy valiosa, tanto para los propios niños y niñas con los que trabajamos como para dar proyección social a la realidad en que vivimos. Es inaceptable que en un país como España, que es la cuarta economía de la Unión Europea, haya un millón de niños viviendo en pobreza severa. Esto es algo con lo que tenemos que acabar”, recalcó Conde.