Eduardo Camavinga se ha convertido en un futbolista indiscutible para Carlo Ancelotti. El jugador francés ha demostrado su polivalencia sobre el césped en partidos importantes y se ha ganado la confianza de su entrenador para rendir al más alto nivel donde se le necesite.
Ancelotti ha descubierto un valor incalculable en su plantilla. El técnico italiano tiene un comodín debajo de la manga para esta importante recta final de temporada. Camavinga se ha convertido en un jugador indiscutible y ha demostrado que puede rendir perfectamente en tres posiciones.
Camavinga acumula siete titularidades consecutivas jugando hasta en tres posiciones diferentes. Lo hizo de interior, en la ida de las semifinales de Copa por ejemplo, jugó de pivote, en el Clásico de Liga entre otros, y volvió a rendir a las mil maravillas de lateral izquierdo en la vuelta de las semifinales de Copa del Rey en el Camp Nou.
El futbolista francés acumula esta temporada más de 2.500 minutos repartidos en 44 partidos. Camavinga ha disputado 27 partidos de Liga, cinco en Copa y otros siete en Champions. Se ha convertido en una pieza capital en todos los esquemas de Ancelotti y su influencia de cara al final de temporada se presenta fundamental.
Un cromo polivalente
El cromo de Camavinga, como los que se coleccionan cada verano, se ha convertido en un valioso comodín. El jugador francés ha demostrado que puede rendir perfectamente juegue donde juegue. El pasado miércoles, durante la histórica goleada en el Camp Nou, Camavinga secó a la banda derecha del Barcelona desde el lateral izquierdo. Sin inmutarse, demostró estar más que preparado para rendir a nivel élite en esa posición.
Pero lo más impactante de Camavinga es no saber cuál es su posición ideal, ya que el nivel que está demostrando en partidos importantes juegue donde juegue es colosal. De pivote ya ha demostrado ser un jugador de época con solamente 20 años, y esa parece ser su posición perfecta. Pero de interior o lateral izquierdo ya ha demostrado que puede romper líneas, dar asistencias y secar a los mejores jugadores del mundo.