Leknessund mantiene el liderato del Giro tras un final descafeinado en el Gran Sasso

• Hugo Carrasco @hugocarrasco92
• Redactor de deportes. Cubriendo a la selección española femenina y al Real Madrid femenino. En OKDIARIO desde 2017.
• • 12/05/2023 17:56
  • Actualizado: 12/05/2023 18:14

Triunfó la escapada en la primera gran etapa de este Giro. Davide Bais, del EOLO de Contador, se llevó el triunfo ante Petilli y Vacek, metiéndole al pelotón una diferencia de 3:10. Los grandes de la general llegaron agrupados, en un final descafeinado y sin ataques, lo que permitió a Leknessund mantenerse como líder una jornada más sin ver alterada su distancia con Remco Evenepoel, que entró en cuarta posición.

El segundo final en alto de la presente edición de la Corsa Rosa llegaba con el imponente Gran Sasso. El nevado Campo Imperatore ponía fin a la primera semana de carrera y lo hacía tras una etapa de 218 kilómetros con salida en Capua y con la ascensión al primer puerto de primera categoría como broche. El pelotón tenía que encarar la subida a Calascio, a la que seguía casi sin descanso la última cota de la jornada.

Desde el comienzo se escaparon cuatro corredores, que formaron la escapada del día. Davide Bais, Simone Petilli, Karel Vacek y Mulubrhan probaban suerte, aunque el último cedería en el Roccaraso, el primer puerto de la jornada. Llegaban a contar con 11 minutos de ventaja respecto al pelotón, donde DSM tiraba con el objetivo de mantener el rosa de Leknessund un día más, puesto que Petilli amenazaba con hacerse con el liderato si conseguía mantener la diferencia por encima de los siete minutos y medio.

Consiguieron reducirla desde atrás antes de encarar la subida del Gran Lasso, cumbre en la que ganó Pantani en su último Giro, el de 1999. Sin embargo, los tres fugados consiguieron disputarse la etapa, con Bais mostrando una superioridad pasmosa en los metros finales. Por detrás, Jumbo y Soudal tomaban el mando e iban adelgazando el pelotón, para lo que podía ser el primer cara a cara entre los dos favoritos para la general: Evenepoel y Roglic.

Pero en los últimos kilómetros, no sucedió nada. Ninguno de los dos grandes de la carrera apostó por saltar al ataque, en busca de dar un golpe a su rival en la general. Evenepoel arrancó sólo en los metros finales, imponiéndose al sprint en el grupo principal, que entró a poco más de tres minutos respecto a Bais.