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La Liga ya denunció la pasada temporada insultos racistas a Vinicius en Son Moix

La denuncia no tuvo recorrido judicial y se saldó con una multa al club

La policía busca ahora al aficionado que profirió insultos racistas al delantero brasileño

La Liga presenta una denuncia por los insultos racistas a Vinicius en Mallorca

El Mallorca trabaja en identificar a los responsables

La Liga ya presentó la pasada temporada una denuncia ante los Juzgados por insultos racistas a Vinicius en Son Moix, pero no tuvo recorrido judicial y todo se saldó con una pequeña multa económica para el club, que anunció este lunes que trabaja en identificar a los responsables de comportamiento xenófobo contra el delantero brasileño. Ayer martes el organismo que preside Javier Tebas volvió a acudir a la Justicia para denunciar por segundo año consecutivo actitudes racistas contra Vinicius en el estadio del Mallorca.

«Una vez analizadas las imágenes y los audios captados desde un lugar próximo a la grada del único fondo del estadio de Son Moix ocupado por público, la Liga ha trasladado toda la información recabada junto con su denuncia, tanto a los Juzgados de Instrucción de Palma de Mallorca, como al RCD Mallorca al objeto de que se persone en la causa», señaló la Liga en un comunicado.

La patronal de clubes recalcó que es la sexta denuncia impuesta por insultos o cánticos racistas en contra de Vinicius. La anterior denuncia se produjo tras el partido en Zorrilla en el que el extremo volvió a ser tratado despectivamente por un sector de la grada de Pucela.  Aún así, tres de esas seis denuncias fueron archivadas por los Fiscales delegados para los Delitos de Odio en Barcelona, en Mallorca y en Madrid, mientras que otras dos están siendo tramitadas ante los Juzgados de Instrucción de nº 4 Valladolid y nº 28 de Madrid.
El Mallorca está muy tranquilo ante la denuncia porque desde el primer momento ha condenado los hechos y se ha mostrado dispuesto a colaborar en la investigación en lo que sea necesario. Ahora son las fuerzas de seguridad, a través de los sistemas de vigilancia instalados en el estadio, los que deben identificar a los implicados y luego será el juez el que determine el tipo de sanción o castigo.