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Lo hacemos todos y es fatal: el motivo por el que no debemos echar agua en lugar de líquido limpiaparabrisas

Líquido limpiaparabrisas

Mantener un vehículo en perfectas condiciones requiere prestar atención a muchos detalles, como el sistema de limpieza del parabrisas. Aunque puede parecer una tarea trivial, rellenar el depósito de líquido limpiaparabrisas con agua en lugar de un producto específico puede acarrear problemas muy serios. Los expertos advierten que esta práctica, habitual entre algunos conductores, puede acortar la vida útil del vehículo.

El sistema de limpiaparabrisas cumple una función crucial en la seguridad vial: permite que el conductor tenga una visión nítida de la carretera. Incluso pequeñas partículas de suciedad, polvo o insectos pueden reducir la visibilidad y, por ende, aumentar el riesgo de accidentes. «Uno de los elementos de nuestro vehículo al que menos atención prestamos es el limpiaparabrisas. Muchas veces, solo nos damos cuenta de que su estado no es el correcto cuando empieza a llover o a nevar. Sin embargo, su función es primordial para garantizar nuestra seguridad, ya que nos permite tener una correcta visión de la carretera», detalla la DGT.

La importancia del líquido limpiaparabrisas

@petroprix 💦 ¿Quién no sabe rellenar el deposito del #limpiaparabrisas aún? Aquí teneis algunos consejos para novatos (recordad hacerlo con el motor en frío que siempre hay alguien que se le olvida 😜) 🚗 #coche #motor ♬ sonido original – Petroprix

Muchos conductores cometen el error de rellenar el depósito con agua del grifo, pensando que sirve como sustituto  del líquido limpiaparabrisas comercial. Sin embargo, esta práctica puede generar daños irreversibles en el sistema, sobre todo durante los meses de invierno.

El principal problema es que el agua se congela a cero grados. Cuando esto ocurre, el líquido se expande y puede provocar la rotura del depósito. Además, el hielo puede afectar los guardabarros, las boquillas de pulverización y los conductos internos.

A esto se suma otro problema: el agua del grifo contiene minerales que tienden a acumularse en las tuberías, formando depósitos de cal que obstruyen el sistema con el tiempo. También existe riesgo de oxidación, ya que el contacto prolongado con agua puede corroer los componentes metálicos internos del circuito.

Mientras, el líquido limpiaparabrisas incluye aditivos que cumplen varias funciones:

  • Evitan que el líquido se congele incluso en condiciones de frío extremo.
  • Eliminan suciedad, insectos y residuos de la carretera sin dejar manchas.
  • Reducen el riesgo de oxidación y ayudan a mantener limpias las tuberías y boquillas.

Alternativas caseras

Si bien los líquidos comerciales son la opción más segura y efectiva, existen algunas alternativas caseras para casos de emergencia:

  • Agua destilada con limpiacristales: mezclar 2 partes de agua destilada y 1 parte de limpiacristales comercial es una solución económica que permite mantener el parabrisas limpio y desengrasado. Esta combinación evita los problemas de cal y minerales presentes en el agua del grifo.
  • Agua destilada con jabón lavavajillas: agregar una pequeña cantidad de jabón líquido para platos (aproximadamente una cucharada por cada 4 litros de agua) crea un efecto desengrasante que ayuda a eliminar suciedad incrustada. Se puede añadir unas gotas de amoníaco para potenciar la limpieza.
  • Agua destilada con vinagre blanco: el vinagre blanco de limpieza ayuda a desinfectar y tiene un efecto ligeramente anticongelante. Para su uso, mezclar con agua destilada en proporción 3:1, o incluso 1:1 en climas muy fríos. Es importante no usar vinagre de cocina, ya que puede dejar residuos y olores indeseables.
  • Agua destilada con alcohol: mezclar 4 partes de agua destilada con 1 parte de alcohol isopropílico ofrece protección contra la congelación y desinfección adicional. En emergencias, se puede utilizar vodka en lugar de alcohol isopropílico, aunque resulta menos económico y efectivo.

Consejos adicionales

«El limpiaparabrisas va más allá de las escobillas, por lo que es importante comprobar que el depósito tiene líquido, sobre todo cuando llegan las primeras lluvias. Si no es así, debemos rellenarlo con un líquido limpiaparabrisas adecuado que incorpore anticongelante para evitar que se congele en caso de que bajen mucho las temperaturas. Además, si vemos que el depósito se descarga con frecuencia, tenemos que revisarlo bien porque quizá tiene una fuga, por lo que habría que cambiarlo o repararlo», señala la DGT.

Una de las principales recomendaciones de los expertos consiste en revisar el depósito con regularidad para asegurarse de que siempre hay líquido suficiente. Asimismo, es esencial evitar rellenar el depósito con agua del grifo, ni siquiera en verano. Finalmente, en ningún caso se deben mezclar productos diferentes, ya que la combinación de químicos puede generar reacciones no deseadas. Siguiendo estas recomendaciones, el parabrisas estará limpio y en perfectas condiciones durante mucho tiempo.

Finalmente, «es aconsejable limpiar las escobillas con un paño con agua, sin usar productos químicos para no dañar las láminas de goma. Debemos hacerlo de manera periódica para eliminar los restos de grasa y suciedad. También tenemos que comprobar que las escobillas no están torcidas y que se adaptan correctamente al parabrisas del coche (si no es así, hay que corregir esa posición de forma manual)».

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