DGT PRÓXIMOS PASOS DE LA DGT

El director de la DGT lo confirma y no te va a gustar: «La baliza V16 sólo es el principio, después…»

La próxima implementación en la hoja de ruta de la DGT: los conos inteligentes

A qué se deben estos cambios que se están produciendo en la señalización de las carreteras españolas

Adiós a la baliza V16: todavía no ha llegado y ya tiene sustituto y es la V27

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Pere Navarro, director de la DGT.

A escasos días de que la baliza V16 conectada pase a ser un elemento indispensable en la guantera de los españoles, el director de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pere Navarro, ha dejado claro que la digitalización de nuestras carreteras no se detendrá en este pequeño dispositivo luminoso.

Lo que muchos conductores percibían como el final de una transición, la jubilación definitiva de los triángulos de emergencia es, en palabras de Navarro, apenas el punto de partida de un ecosistema mucho más ambicioso y tecnológico.

La era de los conos inteligentes

Durante sus recientes intervenciones públicas para aclarar las dudas sobre la normativa que entra en vigor el 1 de enero de 2026, el responsable de Tráfico ha adelantado cuál es el siguiente paso en su hoja de ruta: los conos conectados.

Este nuevo despliegue tecnológico no está pensado para el vehículo particular, sino para la infraestructura. El objetivo es que las zonas de obras, las pruebas deportivas o los transportes especiales dejen de ser sorpresas visuales para convertirse en alertas digitales en tiempo real.

«La baliza V16 es sólo el principio; después de esto vienen los conos conectados», ha afirmado Navarro, subrayando que la intención es que el conductor reciba un aviso en su navegador o en los paneles de la carretera mucho antes de tener el obstáculo a la vista.

¿Por qué este cambio constante?

Aunque para el usuario medio pueda parecer una acumulación de dispositivos y normativas, la DGT defiende esta estrategia basándose en dos pilares fundamentales:

  • Seguridad de los operarios: la colocación de señales manuales es uno de los momentos de mayor riesgo para los trabajadores de mantenimiento. Con los conos IoT (Internet de las Cosas), la ubicación exacta se vuelca automáticamente a la plataforma DGT 3.0.
  • Anticipación: al igual que la baliza V16 evita que el conductor tenga que caminar por el arcén, los conos conectados buscan que el resto de vehículos reduzcan la velocidad con kilómetros de antelación, evitando frenazos bruscos.

Las claves de la transición inmediata

Para los que aún tienen dudas sobre lo que ocurre en apenas unas semanas, Pere Navarro ha sido tajante en varios puntos críticos:

  • Sin prórrogas: no habrá más margen. A partir del 1 de enero, la baliza V16 conectada es obligatoria.
  • Adiós a los triángulos (bajo tu responsabilidad): aunque el director ha comentado con cierta ironía que «no está prohibido» llevar los triángulos si alguien quiere arriesgarse a bajar del coche, la realidad legal es que la baliza será el único método de señalización oficial y válido.
  • El fantasma del rastreo: ante las críticas por la privacidad, la DGT insiste en que el dispositivo es anónimo. No está vinculado a una matrícula ni a un nombre; solo emite una señal de «vehículo detenido» para geolocalizar la incidencia, no al conductor.

La red viaria española se encamina así hacia un modelo de carretera inteligente, donde el asfalto «hablará» con nuestros coches. La baliza V16 ha abierto la valla, pero el futuro parece estar lleno de señales que, antes de verse, se sentirán en el salpicadero.

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