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Eva González y el sufrimiento de las mujeres de los toreros

Sale a la luz la sobrecogedora carta que escribió Iván Fandiño a la muerte

Lucía Bosé, tras separarse de Dominguín: "Le dije que si me quitaba a mis hijos le pegaba un tiro"

Ortega Cano desmiente que se haya cancelado su vuelta al ruedo

Mujeres de toreros
Consulta la galería para descubrir todas las historias de las mujeres de los toreros / Gtres
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Eva González ya se encuentra en Zaragoza junto a su marido Cayetano Rivera Ordóñez desde la noche del pasado miércoles. Sin embargo, no fue hasta la mañana del día siguiente y tras descansar, cuando la modelo acudía al Hospital Quirón de la capital aragonesa, donde el diestro permanece ingresado tras sufrir una cornada de tres trayectorias en el muslo izquierdo mientras toreaba en la plaza de la Misericordia. ¿Lo más llamativo de su imagen? La mirada de Eva, cuya preocupación que refleja es evidente, no hace sino recordar a todas aquellas mujeres de toreros que, como ella, han sufrido de un modo u otro la profesión de sus maridos. CONSULTA LA GALERÍA SUPERIOR PARA DESCUBRIRLAS.

Los amantes de la tauromaquia aún recuerdan la rivalidad que existió entre Luis Miguel Dominguín y su cuñado Antonio Ordóñez (casado con su hermana Carmina). Pero muy pocos reparan en lo que sufrió una jovencisima Lucía Bosé cuando veía torear a quien se convirtió en su marido el 19 de octubre de 1955. Recientemente, Lucía contó en 'Deluxe' que Luis Miguel la conquistó "nada más conocerla". Pero la actriz italiana se enamoró de su espíritu, nunca de su oficio. A Bosé no le interesaban en absoluto los toros. Sin embargo, se dio cuenta en Sevilla de lo que un torero significaba para ella: "Me quedé impactada. Pensé 'me he casado con un asesino, quiero el divorcio'", relató en el citado programa / Gtres
Por su parte, todos los que conocieron a Carmen González Lucas, hermana de Luis Miguel Dominguín y esposa de Antonio Ordóñez, coinciden en sus apreciaciones. Carmen Dominguín temió cada segundo en el que vio torear a su marido porque le amaba. Pero además, se la recuerda como una mujer buena, generosa, alegre y con mucho sentido del humor. Se dice también que fue el pegamento de su familia hasta su muerte, en 1982, cuando un cáncer le arrebató la vida. En la fotografía, podemos verla junto a sus dos hijas, Carmen y Belén Ordóñez, en los años sesenta / Gtres
Carmen Ordóñez creció con aquellos miedos de su madre por perder al patriarca de la familia, Antonio Ordóñez. Carmuca, como la llamaban en casa, se crió entre capotes, muletas, estoques y monteras. Nacido en 1932, 'El maestro de Ronda' se hizo torero a finales de la década de los 40 y ya desde sus comienzos se le reconoció una categoría artística excepcional, ratificada en su alternativa el año 1951 y unánimemente reconocida hasta su retirada definitiva, que se produjo en la temporada de 1971. Hijo del Niño de la Palma, fue su hija Carmen quien hizo posible la continuación de la dinastía de toreros gracias a sus hijos: Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez.
La continuación del linaje torero de los Ordóñez fue gracias al amor que surgió entre Carmen y Francisco Rivera 'Paquirri'. Su enlace se produjo el 16 de febrero de 1973 en la basílica de San Francisco el Grande de Madrid. Aunque se divorciaron en 1979, eso nunca empañó la memoria de Carmen aquel fatídico 26 de septiembre de 1984, cuando 'Paquirri' murió en la Plaza de Pozoblanco de Córdoba cogido por un astado. "Hijos, tengo que deciros una cosa que me hubiera gustado no tener que deciros nunca. Vuestro padre se ha ido al cielo vestido de torero", les dijo a sus dos pequeños que quedaban huérfanos de padre (aunque eso no les impidiera seguir los pasos de su progenitor) / Gtres
Antes de ese fatal desenlace, Paquirri había rehecho su vida con la tonadillera Isabel Pantoja, con quien tuvo otro hijo, el pequeño Francisco José Rivera Pantoja, 'Kiko', en 1984. La prensa de la época recoge que, a la muerte de Paquirri, Carmen e Isabel entraron en duelo y las dos se disputaron el título de 'viuda de España'. Pero, ante todo, Carmen tenía claro que quería luchar por lo que le correspondía a sus hijos. Una lucha con la que cargó para el resto de sus días. Hoy, la prensa sigue recogiendo titulares de la herencia del torero y su correspondiente disputa entre Isabel Pantoja y los hijos de la desaparecida Carmen Ordóñez / Gtres
Francisco Rivera, hijo de Paquirri, tuvo más suerte que su padre, pero los momentos de incertidumbre y pánico vividos por su esposa, Lourdes Montes, fueron similares a los que en su día vivieron Pantoja y Carmen con su predecesor. La cornada que sufrió Rivera Ordóñez en la plaza de toros de Huesca en agosto de 2015 con su mujer a punto de dar a luz, hizo que muchos recordaran la tragedia de Pozoblanco, aquella tarde del 26 de septiembre de 1984 en la que Paquirri encontró la muerte / Gtres
Francisco Rivera salió sano y salvo de aquel amargo capítulo en su vida y pudo disfrutar del nacimiento de su hija, Carmen (un nombre en honor a su abuela). Pero el destino es caprichoso y ahora ha sido su hermano, Cayetano, quien ha sufrido la última cornada, y la mujer de este, Eva González quien, embarazada de cuatro meses, refleja el mismo sufrimiento en su mirada que el que mostraba su cuñada, Lourdes, hace ya más de dos años / Gtres
Por desgracia, no todos los toreros tienen la misma suerte que Francisco y Cayetano. Algunos de ellos dejan a sus viudas rotas de dolor como ya hemos visto antes. El pasado 17 de junio, el diestro Iván Fandiño dejaba huérfano el mundo de la tauromaquia tras recibir una grave cornada en un pulmón mientras toreaba en la ciudad Aire-sur-l'Adour (sudoeste de Francia). Su viuda, Cayetana García Barona, aún supera su dolor y lo hace apoyándose en una carta que se encontró unos días después de la muerte de Fandiño en la que el torero escribía directamente a la muerte antes de salir a una de sus faenas. "Imagínate la emoción que sentí cuando la leí", contó Cayetana al diario 'ABC' / Gtres
En otros casos opuestos al de Cayetana, sucede que es el torero quien enviuda. Este ha sido el caso de José Ortega Cano. El diestro, que se ha cortado la coleta en este mismo 2017, perdió a su mujer, Rocío Jurado, el 1 de junio de 2006, consecuencia de un cáncer de páncreas / Gtres
Sin embargo, el torero rehizo su vida sentimental en 2013 con Ana María Aldón, con quien va a casarse en verano de 2018. Con esta premisa, ha sido Aldón quien ha vivido la agonía de que no le cogiera el toro a su prometido hasta el pasado 26 de agosto, el día en el que Ortega se 'cortó la coleta' rodeado de polémica -sustituyó en cartel a Morante de la Puebla y a muchos aficionados no les gustóel cambio-. / Gtres
Mal también es como lo ha pasado Virginia Troconis, mujer de Manuel Díaz 'El cordobés', quien ha vivido en propias carnes las numerosas cogidas de su marido. En la fotografía el matrimonio se deja ver tras una de ellas. Data del 26 de abril de 2010 / Gtres
El 7 de octubre de 2011 es una fecha que Lidia Cabello jamás podrá olvidar. De hecho, este es un día que le habrá venido a la memoria tras la cogida de Cayetano Rivera, ya que fue en el coso de la Misericordia de Zaragoza donde Juan José Padilla sufría una de las cogidas más graves de su vida. Tal fue la virulencia de aquellos fatídicos segundos, que Padilla terminó perdiendo el ojo izquierdo y fue su mujer quien permaneció a su lado en cada minuto de su posterior recuperación / Gtres
Quien ha sabido mantener su vida privada a buen recaudo ha sido José Tomás. Su novia, Isabel, se ha dejado ver muy poco en la vida pública y un ejemplo es el de estas vacaciones junto al diestro en las playas de Cádiz en el verano de 2012 / Gtres
Enrique Ponce y su mujer, Paloma Cuevas / Gtres
También existe el ejemplo de las mujeres de toreros que se divorcian antes que seguir sufriendo por ellos. A Patricia Rato y Juan Antonio Ruíz 'Espartaco' les une su amor hacia sus hijos, pero eso no fue suficiente para mantener vivo el matrimonio. Su historia de amor mereció la pena por sus tres hijos, pero el final de la historia no era el que soñaron. Recientemente, LOOK ha podido hablar con el diestro quien asegura "no tener ni idea" de los problemas de su exmujer con la justicia, pese a todo lo que ella vivió a su lado. "Hace tiempo que no hablo con ella", confesó 'Espartaco' a este digital / Gtres
No podemos terminar nuestro repaso a las mujeres de los toreros sin recordar el caso de María José Campanario. Ese 'annus horribilis' de Campanario ha eclipsado ea otra faceta en su vida. La de 'mujer de torero'. Pero no hay que olvidar que a María José nunca le ha gustado ver torear a Jesulín. De hehco, ella y su familia fue uno la razón principal por los que el diestro decidió dejar los ruedos en 2007. La llegada al mundo de su tercer hijo hizo comprender a Jesús que había llegado la hora de dedicarle más tiempo a los suyos, aunque según dijo entonces la madre de Campanario, "ya cuida mucho de su mujer y de sus hijos" / Gtres

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