El paseo neoyorkino de Carlos Herrera y su hija Rocío Crusset
La modelo vive en la ciudad de los rascacielos desde hace siete años.
Un amor incondicional. Eso es lo que destilan las imágenes de Carlos Herrea junto a su hija Rocío Crusset en Nueva York. El periodista ha viajado hasta la ciudad de los rascacielos para reencontrarse con la modelo, que vive en el lujoso barrio de Chelsea desde hace casi siete años. La joven, que decidió mudarse a Estados Unidos para probar suerte en el mundo de la moda, parece haberse adaptado a las mil maravillas a la vida neoyorkina, un ritmo frenético que el locutor de radio ha podido saborear durante unos pocos días.
Sonrientes y con evidentes muestras de cariño, padre e hija han paseado alegremente por las calles de Nueva York haciendo alarde de su gran complicidad. Rocío Crusset, que lucía un sencillo look de pantalón y top en color negro, parecía estar feliz de tener a su padre junto a ella, lo mismo que Carlos Herrera, que compartió confidencias con la joven. Una excelente relación que se mantiene pese a la distancia.