Antonio Tejado sobrepasado: de los reproches de Jorge Javier Vázquez al “abandono” de Candela
El ex de Rosario Mohedano vive su noche más difícil. Mientras Jorge Javier le acusa de fraude, Candela se niega a hacer el alegato final a favor de su permanencia en el concurso.
Noche de conflictos en GH DÚO. Muchos son los frentes abiertos dentro de la casa más famosa de la televisión. Tres parejas acaparan la atención y las peleas: Sofía Suescún y Alejadro Albalá, Candela y Antonio Tejado y María Jesús Ruiz y Julio Ruz. Nadie dijo que iba a ser fácil, pero no deja de ser curioso que se traten de tres “parejas” sumidas en una profunda crisis y con muchas cuentas pendientes por aclarar. Dice el dicho que lo que mal empieza, mal acaba. El desenlace final es una incógnita pero lo que si es cierto es que ninguno de ellos atraviesa su mejor momento.
Antonio Tejado, abandonado a su suerte por Candela
¡Candela no quiere hacer el alegato a favor de Antonio!: «Después del llanto me dice ‘ahora vamos a jugar con inteligencia’» #GHDÚOLímite2 pic.twitter.com/MY3AzOPvTe
— Gran Hermano (@ghoficial) January 23, 2019
El sobrino de María del Monte entró en la casa de Guadalix de la Sierra en pleno proceso de “separación” de su novia, Candela. La ex pareja ha pasado por varios momentos difíciles en los últimos días pero ninguno como los que se vivieron ayer por la noche. Nada más empezar el Límite 48h, Jorge Javier Vázquez dio paso a un vídeo en el que se veía a Antonio y Candela ideando una estrategia que les perjudicara lo menos posible. Tales hechos fueron interpretados por el presentador como una estafa hacia el programa: “me siento engañado por Antonio Tejado”.
Jorge Javier: «¿Tú quieres que se vaya Antonio?»
Candela: «Tengo un 40 de que no y un 60 de que sí» #GHDÚOLímite2 pic.twitter.com/poEaGRGSTh— Gran Hermano (@ghoficial) January 23, 2019
No obstante, ese no fue el momento más duro de la noche. Tras unos fuertes reproches entre la “pareja” Candela decidió abandonar a Tejado completamente a su suerte en el concurso y se negó a hacer el alegato a su favor por la permanencia en el mismo. Antonio terminó llorando, sobrepasado por la tensión acumulada en las últimas horas. La actitud de Candela fue la puntilla para que estallara por completo.
Gil Silgado: el tercero en discordia entre María Jesús Ruiz y Julio Ruz
María Jesús: «Yo cuando estaba con José María pensaba que iba ser el hombre con el que iba a estar siempre y con Julio yo siempre tenía en mi estómago ‘yo con este hombre no acabo’» #GHDÚOLímite2 pic.twitter.com/miUOO4rA46
— Gran Hermano (@ghoficial) January 23, 2019
Curva de la vida para María Jesús Ruiz y Julio Ruz. Nunca la palabra curva tuvo tanto sentido. La relación entre esta ex pareja, con una hija en común, es una auténtica montaña rusa. A ratos enfadados, otros reconciliados, entraron en la sala completamente enfrentados. La ex miss España empezó con su trayectoria vital y no tardó en salir el nombre de otra de sus ex parejas: Gil Silgado. Las comparaciones son odiosas y la de Andújar no quiso responder si había sido más feliz con Silgado que con Ruz. Lo que sí dijo es que mientras duró su relación con el empresario “creía que envejecería con él”, palabras que dolieron mucho a Julio. A día de hoy parece que sus posturas son completamente irreconciliables. Entre ellos la bronca fue monumental hasta el punto que tuvo que intervenir el “Super” y el presentador.
Sofía y Alejandro: el cuento de nunca acabar
Ylenia: «¿Qué cosas bonitas le dices?»
Sofía: «Te quiero y no sé qué»#GHDÚOLímite2 pic.twitter.com/BpqI8UCwYy— Gran Hermano (@ghoficial) January 23, 2019
Lo de esta ex pareja es un ir y venir sin fin. La última decisión que ha tomado la navarra ha sido de separar las camas. La razón no es otra que la gran confusión que genera su relación- o como quiera llamarle- com Alejandro Albalá. El ex de Chabelita está completamente enamorado de Sofía y así se lo hace saber. Por el día, la ex gran hermana reniega de él pero por la noche da rienda suelta a su amor: “te quiero. Quiero estar contigo y tener un hijo tuyo”. Estas palabras pronunciadas por Sofía llenaron de esperanza a Alejandro. Sin embargo, Sofía le pidió que las mantuviera en secreto, hecho que indignó a Albalá que se lo reprochó en el confesionario. La de Pamplona terminó llorando: “tengo la necesidad de sentirme constantemente querida”. Es, en definitiva, el cuento del nunca acabar.