El último desencuentro entre Ágatha Ruiz de la Prada y Pedro J. Ramírez
«Íñigo Méndez de Vigo es el ministro que más me gusta. Es culto y divertido. Le quiero un montón» son las palabras de elogio y distinción que Ágatha Ruiz de la Prada dedicó al hombre encargado de concederle su último reconocimiento, el Premio Nacional de Diseño de Moda 2017. Las pronunció en una charla con la revista ‘Diez Minutos’ por gratitud hacia la persona responsable de la cartera de Cultura del país. Pero, ¿era solo eso? ¿Gratitud?
Existe un aspecto que en un primer término podría pasar desapercibido y es que Méndez de Vigo es una de las figuras del Gobierno que más ha criticado públicamente el exmarido de la diseñadora. En sus artículos de opinión en ‘El Español’, diario que dirige, Pedro J. Ramírez no ha dudado en juzgar la actuación política en el controvertido asunto de Cataluña, tildando al ministro de «cheerleader antes que jurista» o de «torpe» por no haber podido prever la marcha de Carles Puigdemont a Bruselas. Además acusa directamente al órgano regidor del país de «cobardía e incompetencia ministerial». Todas ellas son solo algunas de las afirmaciones de crítica que Pedro J dedica al ministro de Cultura y al resto de equipo de Gobierno, recogidas en el texto ‘Las talegas de Méndez de Vigo’, del pasado 5 de noviembre.
Íñigo Méndez de Vigo / Gtres
Ágatha Ruiz de la Prada ha elegido este momento para enaltecer la figura del ministro, justo después de que el padre de sus hijos cargase contra él. ¿Ha querido lanzar un dardo a Pedro J. Ramírez? Una versión que no sería para nada demasiado elucubrada, ya que la modista ha aprovechado en más ocasiones para hablar sin tapujos de su caduco matrimonio, como en su visita a ‘El Hormiguero’: “Antes estaba atontada y no era feliz, ahora hago lo que quiero en cada momento. Me divierte todo, desde el trabajo hasta un camarero o un joven… Sí, los jóvenes también. Me divierte todo».
Lo cierto es que Ágatha Ruiz de la Prada ha comenzado a rehacer su vida y ahora se encuentra en un momento «de mimos y alegrías», tal y como ella misma lo define. Tras cumplirse un año del divorcio, confirmó que lo iba a celebrar y que iba a ser «la bomba». Su flamante premio confirma su buen momento profesional, pero en lo personal parece que aún quedan algunas cuentas pendientes entre Pedro J. Ramírez y la diseñadora.