Thermage FLX: el tratamiento que Elsa Pataky se hace en España para tensar su piel sin cirugía
Una sesión al año, cero agujas y resultados que duran hasta 24 meses
Un tratamiento que trabaja en las capas profundas de la piel para tensarla desde dentro
Actúa justo donde nace el colágeno. Y lo reactiva como si tu piel tuviera 20 años menos

Cuando Elsa Pataky pisa suelo español, no solamente visita a su familia ni se deja acariciar por el sol mediterráneo. También se reserva un momento para sí misma, para cuidarse y reconectar con esos rituales de belleza que la hacen brillar desde dentro. Uno de sus imprescindibles es Tacha Beauty, el exquisito santuario estético fundado por Natalia de la Vega. Allí, la actriz confía en una de las tecnologías más avanzadas y discretas para mantener su piel firme y luminosa: Thermage FLX.
A sus 48 años, la actriz deslumbra con un rostro sereno y terso, sin rigidez ni signos evidentes de intervención. Esa armonía entre frescura y madurez no es fruto del azar, sino de una filosofía de cuidado basada en la prevención, la naturalidad y la ciencia. Su secreto no está en un bisturí, sino en un tratamiento que estimula el poder regenerador de la piel desde las capas más profundas.
Una especialista aplica el dispositivo Thermage sobre su frente, mientras Elsa permanece relajada. (Redes Sociales)
La gran ventaja es que no requiere inyecciones ni múltiples sesiones. Con una sola aplicación al año, que dura entre 45 y 90 minutos, se consiguen efectos que pueden mantenerse entre 12 y 24 meses, dependiendo de factores como la edad, el estado de la tez o los cuidados posteriores. Se puede aplicar en el rostro, cuello, escote, párpados, mandíbula, e incluso en el cuerpo: abdomen, brazos o muslos. Y lo mejor: no hay agujas, incisiones ni recuperación. Apenas un leve enrojecimiento temporal que desaparece en horas.
Eso sí, no estamos hablando de un tratamiento low cost. El precio por sesión varía entre 1.500 y 2.500 euros, dependiendo de la zona a tratar. Una inversión que muchas, como la esposa de Chris Hemsworth, consideran razonable cuando el objetivo es quitarse años de encima, sin artificios ni efectos secundarios.
Así es una sesión de Thermage FLX, el tratamiento favorito de Elsa Pataky paso a paso
Uno de los detalles más curiosos del tratamiento —y que suele despertar preguntas— es el dibujo cuadriculado que aparece en su cara durante la sesión. No es decorativo, sino una herramienta de precisión. Se trata de un marcador de trazado, una especie de plantilla adhesiva que deja una cuadrícula sobre la piel. Sirve para guiar al profesional, garantizando que la energía térmica se distribuya de manera uniforme y sistemática en toda la zona. Así se evita repetir disparos o dejar áreas sin tratar.


Elsa Pataky en pleno procedimiento de Thermage FLX, recostada sobre una camilla en la clínica estética TACHA. (Redes Sociales)
La sesión comienza con una limpieza profunda y una evaluación personalizada. Luego se coloca la cuadrícula, y el aplicador del Thermage se va desplazando cuadro a cuadro, activando pulsos de calor acompañados de una vibración suave y un sistema de enfriamiento que protege la epidermis. La sensación es completamente tolerable —incluso relajante— y no requiere anestesia. Al terminar, se retira la plantilla, se aplica una crema calmante y el paciente puede seguir con su rutina diaria sin restricciones.
Los efectos inmediatos son sutiles, pero reales: una ligera tensión, un contorno más definido. Sin embargo, el verdadero cambio se desarrolla lentamente, como una flor abriéndose: los mejores resultados se aprecian a los 2-3 meses y pueden seguir mejorando hasta los seis.