Mario Vargas Llosa, Patricia Llosa y un viaje con sabor a reconquista

Hace tan solo dos semanas saltaban todas las alarmas en torno al estado de salud de Mario Vargas Llosa. A unos días de que Tamara Falcó pasase por el altar, el Premio Nobel le quitó todo el protagonismo por culpa del covid. Ahora, completamente recuperado y volviendo a tomar las riendas de su vida, ha copado de nuevo titulares por su última escapada de verano con una acompañante de lo más especial.

Al parecer, nada más salir del hospital, el escritor se puso manos a la obra a organizar este viaje que, aunque en un principio empezó siendo algo romántico, terminó por ser de lo más familiar. Después de superar su último revés de salud (y coincidiendo con el enlace de la marquesa de Griñón), Mario, Patricia y uno de sus hijos pusieron rumbo a Sicilia para disfrutar de la temporada estival como antaño.

Tal y como ha informado Vanitatis, la idea del Premio Nobel era escaparse con su ex mujer, pero debido a sus problemas de movilidad ha tenido que contar con la presencia de sus hijos. Pero este pequeño detalle no ha eclipsado el motivo del viaje: su reconquista. Desde que Vargas Llosa puso punto final a su historia de amor con Isabel Preysler, ha centrado todos sus esfuerzos en reconciliarse con Patricia, algo que finalmente ha conseguido. Ahora, estaría intentado dar un paso más y volver a tener esa idílica relación de la que un día fardaron.

El círculo más cercano del escritor ha confesado para el digital que «la trata como una auténtica reina» y que, por supuesto, el cariño está siendo el gran protagonista de su buena sintonía. Parece que ambos están dispuestos a recuperar lo que un día tuvieron, esa familia que fue muy feliz. A día de hoy, se desconocen a ciencia cierta las causas por las que Isabel Preysler y Mario rompieron, pero lo que está claro es que al escritor le ha servido para comenzar una nueva etapa más cerca de su familia que nunca.

Una nueva novela, ¿con dardo incluido?

Esta presunta reconquista ha coincidido con el lanzamiento de su último libro, Le dedico mi silencio, que verá la luz el próximo 26 de octubre. Según han informado desde la editorial Penguin Random House, esta obra «narra la historia de un hombre que soñó un país unido por la música, y enloqueció queriendo escribir un libro perfecto que lo contara». Pero esta nueva aventura no ha estado exenta de polémica.

Hace unos meses, el miembro de la Academia Francesa concedió una entrevista al medio El comercio en la que reveló algunos detalles del texto, como su título, ¿Un champancito hermanito?. Ahora parece haber cambiado de opinión y muchos han apuntado que este nuevo nombre es una indirecta para la mujer que, hasta hace poco, ocupaba su corazón: Isabel Preysler. Y es que, no sería la primera vez que la socialite se ve inmersa en algunas de las obras de su ex, puesto que el pasado mes de enero se rescató el cuento Los vientos que, aunque entonces pasó desapercibido, cuando separaron sus caminos se entendió como el relato de Vargas Llosa sobre su soledad respecto a su pareja. ¿Se repetirá la historia?