El motivo que hizo que Lolita Flores fuera una de las grandes ausentes de la boda de Chenoa

Probablemente el 17 de junio sea, a partir de este 2022, un día marcado en el calendario de Chenoa para toda la vida. Y no es para menos, ya que, después de haber pospuesto su boda hasta en dos ocasiones a consecuencia del coronavirus, la cantante finalmente ha podido darse el “sí, quiero” con Miguel Sánchez Encinas frente a la atenta mirada de todos sus seres queridos y de los medios de comunicación que estaban presentes en el que ya se ha convertido uno de los eventos clave del año.

Como ya dijo en ocasiones anteriores, la artista tenía previsto llevar a cabo un enlace íntimo y privado, contando con la presencia de sus más allegados y de, tan solo, algunos de sus excompañeros de Operación Triunfo. Pero esa hermeticidad no ha evitado que ésta haya sido una fecha de ensueño para la protagonista, que se enfundó hasta en dos vestidos de Hannibal Laguna: el primero de ellos, un diseño en doble crepé color tiza, con escote en V, espalda abierta esculpida con cordones de cristal y una espectacular cola de casi tres metros; y el segundo, más “ligero y sexy”, compuesto por un atrevido cuerpo de tirantes con escote de pico y falda con amplia abertura. Dos elecciones idílicas que la novia combinó con un abanico joya de Olivier Bernoux para combatir las altas temperaturas propias de Mallorca por estas fechas y que plasmaban a la perfección su exquisito estilo.

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La revista ¡Hola! ha sido la encargada de colarse en uno de los enlaces más esperados, pudiendo vivir en primera plana algunas de las emociones que sintió la pareja durante los momentos previos y posteriores a su paso por el altar, los cuales tuvieron lugar en la finca Comassema, ubicada en el corazón de la sierra de Tramontana.

Un enlace muy emotivo

Durante su camino hasta el altar, Chenoa consiguió que algunos de los invitados presentes, como su hermano Sebas y su amiga Natalia Rodríguez, rompieran a llorar. Todos ellos eran conscientes de que estaban a punto de vivir uno de los días más emotivos de sus vidas en el que la escritura y abogada Cruz Sánchez de Lara cobró un gran protagonismo, ya que fue quien presentó a la pareja durante una cena en su casa, a principios de 2019: “Discrepo de esos titulares que han querido vender falsas ideas. Tú eres afortunadísima en el amor”, confesaba la esposa del periodista Pedro J. Ramírez frente a las cámaras de ¡Hola!.

El momento estrella de los invitados con una gran ausencia

Una vez convertidos en marido y mujer, Chenoa y Miguel eran felicitados por todos sus familiares y amigos con una lluvia de pétalos blancos mientras de fondo sonaba un tango de Gardel con el que daban el pistoletazo de salida a un cóctel de lo más animado. No obstante, llamaba especialmente la atención la ausencia de Lolita, de la que la novia desveló el motivo: “Lolita está a punto de ser abuela. Así que lo más importante es que esté con su hija y que todo vaya bien. La adoro y la quiero muchísimo. La he echado mucho de menos y ya tenemos tiempo de juntarnos”, indicaba, demostrando así que la artista había dado prioridad a la posible maternidad de su hija, la cual se espera que tenga lugar muy pronto.

Más tarde, tomaron un almuerzo servido por el catering Amida, compuesto por langostinos de San Carlos, tartar de tomate y gazpachuelo de mandarina y cochinillo mallorquín con cebollita tierna y salsa de albaricoque. Unas delicias que complementaron con un milhojas de mascarpone, café y dulce de leche con frambuesas como postre. Aunque si algo llamó la atención, es que entre primer y segundo plato la intérprete aprovechó para cambiarse de vestido y así continuar con la fiesta con un outfit más cómodo y propio para el clima.

Lo mejor de la fiesta

Una vez concluyó el convite, Chenoa pudo hablar con el medio de comunicación mencionado sobre la parte positiva de haber atrasado su matrimonio: “Nos ha dado tiempo a otras cosas y a estar al mil por mil seguros de este gran paso”, señalaba, para después admitir haber llorado ante la emoción del momento: “Lo he hecho, de puros nervios y por la emoción desbordada. Soy humana y muy intensa (…) Ha habido muchos momentos preciosos, pero el más emotivo fue el del intercambio de las alianzas”, zanjaba. Aunque, probablemente, para los fieles seguidores de Operación Triunfo, el mejor momento tras el banquete fue en el que todos los exconcursantes invitados se unieron en un tierno karaoke para entonar al unísono Mi música es tu voz, señalando al cielo para dedicársela a Álex Casademunt.