Kiko Rivera triunfa un año después de vivir su peor revés de salud
En tan solo diez días se cumplirá un año desde que Kiko Rivera sufrió un ictus cerebrovascular que le obligó a permanecer ingresado un tiempo en el hospital. Ocurrió, exactamente, el 20 de octubre de 2022, fecha que él mismo ha bautizado como «el día que volvió a nacer» ya que, según ha contado a través de sus redes, sufrió ciertas secuelas que dejaron su estado de salud pendiendo de un hilo. «Afectó a toda la parte izquierda de mi cuerpo, dejándome la cara y el brazo paralizado por completo. La boca se me dobló, me quedé sin fuerza y perdía el equilibrio», explicó en su canal de Twitch.
Después de llegar a pensar que «no salía de esta», Kiko se considera un hombre muy afortunado tras no haber tenido que enfrentarse a graves consecuencias. Meses después del inesperado revés de salud, el Dj señalaba que su vida había cambiado por completo ya que había dejado de fumar al mismo tiempo que había implementado una rutina alimentaria y deportiva equilibrada y saludable en su día a día. Lo que el hijo de la tonadillera no se esperaba era que, un año después, hiciera historia en su carrera musical con un nuevo hit que marcaría, en cierta parte, su trayectoria detrás de los micrófonos. El Mambo es el título de la nueva canción que está arrasando en las diferentes plataformas digitales, llegando a posicionarse en el número uno de los temas más escuchados en España en Spotify.
Kiko Rivera en un concierto/ Gtres
Así, teniendo el cuenta lo mucho que ha cambiado su vida en tan solo 365 días, Kiko Rivera ha querido hacer un pequeño balance en sus redes sociales: «Hace algo menos de un año (falta apenas una semana) ingresé en el hospital con un ictus que casi me quita la vida. No me dejó ningún daño y conseguí recuperarme. Unos meses después, sufrí un amago de infarto, del que también me recuperé y no tuvieron que operarme», comienza a escribir. «Hoy, 10 de octubre, soy portada y número 1 en la mayor playlist de mi país», prosigue, añadiendo una pequeña lección que él mismo ha aprendido en este periodo de tiempo. «Nunca dejen de soñar, nunca dejen de creer en vosotros mismos. Y siempre, siempre manténganse humildes», concluía.
Seguidamente, publicaba un selfie donde esbozaba una gran sonrisa que dejaba entrever el buen momento profesional que está viviendo tras sufrir uno de los peores revés de salud de su historial médico. «Feliz y agradecido por todo lo que me está ocurriendo», escribía sobre la fotografía, compartiendo de fondo la canción que le ha regalado este éxito laboral. Sin duda, su vida ha dado un giro de 180 grados pero hay algo que no ha conseguido cambiar en este año: la relación con su madre. Kiko decidió cortar todo tipo de contacto con Isabel Pantoja tras la polémica que generó la herencia de Cantora y, desde entonces, no ha vuelto a mantener una relación idílica con su progenitora, pese a que las circunstancias que le han obligado a permanecer en el hospital, hayan sido una excepción.