Jorge Javier, preocupado, manda un mensaje a Teresa Campos: "Bigote se siente desplazado"

Por fin ha comenzado la esperada aventura en Honduras. Los concursantes de ‘Supervivientes’ se encuentran en Cayo Menor, en la paradisíaca playa Uva. Aunque el concurso acaba de arrancar oficialmente, las rencillas, los malos entendidos y las salidas de tono han protagonizado las primeras horas del reality. La gran apuesta de esta nueva edición, Bigote Arrocet, parece no terminar de ubicarse entre sus compañeros, al menos con el grupo inicial que le han asignado.

Contrariamente a como suele mostrarse públicamente, Edmundo no tiene el chiste a punto, se muestra aislado, poco interactivo con sus compañeros y tan solo responde cuando se le pregunta directamente. Con una camiseta de cuello vuelto y otra encima de manga larga pintada por él mismo- como ya demostró su destreza en el reality ‘Las Campos’- la pareja de María Teresa Campos se refugia de este modo de su intolerancia al sol. En estas primeras horas, su actitud pasiva ha llegado a preocupar tanto al programa que el presentador del mismo, Jorge Javier Vázquez, obedeciendo órdenes, y visiblemente preocupado, ha mandado un mensaje desde plató a Teresa Campos: «Por si nos estás viendo, me dicen que te informe de que Bigote se siente desplazado por su grupo. Parece que no sienta bien su fuerza en la supervivencia y que nunca se queje».

Antes de viajar a Honduras, el cómico dejó patente su fuerza mental. De hecho, ni siquiera en el momento en que la organización de ‘Supervivientes’ -con motivo del cumpleaños de Janet Capdevila- ha agasajado al grupo con dos pollos asados Bigote se ha acercado.

Los únicos momentos en que se ha visto a un Edmundo enérgico y presto han sido en las pruebas del curso de supervivencia o en el intento de prender fuego. Su salto del helicóptero se lo ha dedicado a «todos los saltadores olímpicos» y no ha querido nombrar el nombre de su pareja, Teresa. Bigote ha confesado no tenerlas todas consigo de si la presentadora está viendo el concurso porque «no le gusta verme sufrir».

La tensa relación de Alba Carrillo con su madre

La convivencia no es fácil entre desconocidos y genera tensos intercambios de opiniones. Pero no solo entre desconocidos, Alba Carrillo y su madre, Lucía Pariente, han vivido una tensa discusión en estas primeras horas del reality. Su relación es volcánica. La modelo ha llegado a asegurar que su madre es un lastre para ella y que psicológicamente la perjudica: «Tengo mucha más fuerza sola. Ella está aquí por ser mi madre, si no no la conocería ni Rita la cantaora».

La matriarca ha confesado, incluso, que nunca estuvo enamorada del padre de Alba, algo que ha enfurecido enormemente a la modelo. «No entiendo que puedas decir eso, y menos aquí rodeada de gente. Yo nunca diría algo así delante de mi hijo. Me enamoré de mi exmarido y salió mal, pero que digas eso de mi padre es muy fuerte. Ya me has dejado a los pies de los caballos. ¡Vete con dignidad por favor!», ha explotado Alba. En un momento de ira incontrolable ha llegado a espetar que va a nominar a su propia madre.

«Me has destrozado, sabes la presión mediática que tengo y que digas eso de mi padre me duele, me ha superado», ha añadido la modelo. Según ella, es «súper hermética» y en realidad no habla de su vida personal. Tanta tirantez existe entre madre e hija que la defensora en plató de Lucía Pariente, su hermana Almudena, teme que abandone el concurso.

Por su parte, Gloria Camila tiene preocupado a su padre, el torero José Ortega Cano. Así se lo ha confesado Jorge Javier en directo: «Tu padre está en estos momentos muy inquieto y no sabe si va a poder verte». La joven ha querido tranquilizarlo: «Papá, te quiero muchísimo. No te preocupes, estaré bien. Lo que gane te lo dedico a ti, a Josefer y al enano». Este último es fruto de la relación actual que mantiene el torero con Ana María Aldón. En estas escasas horas, Camila ya ha lanzado pullas contra su hermana Rocío Carrasco, a la que no la considera como tal y ha tildado de «mala madre».

Además, Gloria, que ha viajado a Honduras junto a su novio Kiko, ha dejado patente su fuerte carácter, enfrentándose a la italiana Paola Caruso, concursante que ha sacado de quicio a su vez a Alba Carrillo. Todo parece indicar que los roces no han hecho más que empezar, teniendo en cuenta que los grupos van a estar divididos en tres categorías: el cielo, el infierno y tierra de nadie. En esta última sus habitantes no tendrán nada a su disposición y apenas peces que pescar. Ahí residirán, entre otros, Alba y su madre. El carácter y el hambre harán el resto.