Isabel Pantoja hace las maletas y vuelve a casa antes de lo previsto
Tras más de un año sin actividad, la cantante Isabel Pantoja conseguía cerrar su vuelta a televisión con su fichaje para el programa 'Top Star'. Sin embargo, vuelve a casa antes de lo previsto ante la reducción de programas del “talent show”. ¿Cómo afecta a las cuentas de la cantante?
Vuelta a casa antes de lo previsto. Tras más de un año sin actividad profesional, Isabel Pantoja reaparecía en televisión como jurado de ‘Top Star’, un nuevo programa de talentos musicales junto a Risto Mejide y la joven artista mexicana Danna Paola. Nueva etapa y nuevos ingresos que sanearían en parte su maltrecha economía.
Los problemas económicos, las deudas y embargos de Hacienda, ahogan a la cantante desde hace años. Su vuelta al trabajo prometía cierto alivio, al menos, en parte. Su contrato, importante en cifras como siempre, superaba los 300.000 euros por intervenir en los 10 programas previstos, pero los más que discretos resultados de audiencia han trastocado los planes de la artista. Se grabarán solo 8 programas por lo que es lógico pensar que sus ingresos se reducirán en consecuencia, a no ser que hubiera blindado su reaparición, dato que no estoy en disposición de confirmar. Dos programas menos, dos finalistas menos y vuelta a casa antes de tiempo. El calendario de trabajo, alterado. El día 31 de mayo hubiera sido el último día de grabación, pero no lo será. Acabaron este viernes. La audiencia manda.
Isabel Pantoja, durante la presentación de Top Star / Gtres
El contrato de Pantoja con Mediaset seguía en vigor y había que cumplirlo. La cadena le ofreció, en diferentes ocasiones, distintas opciones: un programa en Navidad, un espacio de entrevistas otro en el que la artista narrara su trayectoria personal y profesional y hasta participar en la “casa” de Bertín Osborne o en el “planeta” de Jesús Calleja, pero la artista no aceptó ninguno. ‘Top Star’ era perfecto. Trataba de música y evitaba tener que hacer declaraciones sobre el enfrentamiento con su hijo.
Desde que estallara el cisma familiar Rivera-Pantoja y su hijo Kiko declarara públicamente los problemas de relación que tenía con su madre, Isabel no quiso saber nada de los medios. Pasó el año de confinamiento lejos de todo y de todos. Las declaraciones de su hijo el pasado otoño la dejaron en shock. Nunca imaginó verse en esa tesitura. Con los hijos mayores de su marido, los hermanos Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez, había tenido problemas, sus más y sus menos, desde siempre. Llegaron a demandarla, incluso, tras su actitud torticera de no entregarle los enseres personales que su padre, el diestro Francisco Rivera Paquirri, les dejó en herencia. Ella, depositaria de “las cosas de papá”, que el torero guardaba en Cantora, era la encargada de cumplir con las últimas voluntades de su marido. Nunca lo hizo. Fue su propio hijo Kiko quien abrió la caja de Cantora cuando en noviembre pasado, durante su entrevista en el programa ‘Cantora, la herencia envenenada’, aseguró haber descubierto que los enseres que sus hermanos mayores llevan más de 30 años reclamando seguían allí, guardados en una habitación de la finca. Isabel se hundió en lo más profundo al ver que su querido hijo la dejaba en evidencia en público. Entre la humillación y el carácter, la ruptura madre e hijo fue ipso facto.
Con el paso de los días cada uno ha ido tomando fuerzas y sus propias decisiones, que pasan, en el caso de Kiko Rivera por acciones legales. Ha requerido notarialmente a su madre una rendición de cuentas de la administración de la finca Cantora, de la que él es copropietario, información sobre el dinero que Paquirri tenía en Latinoamérica y las subvenciones que la finca ha recibido a lo largo de los años. Para terminar, Kiko le comunicaba su decisión de vender su parte de Cantora y pedía que le entregara los enseres personales que su padre le dejó en herencia. La respuesta de la madre está aún por terminar de definirse, pero en cuanto a los enseres de Paquirri ha contestado que “en Cantora no hay ni trajes ni nada”, según me explican. Además, Kiko ha interpuesto una denuncia penal a Agustín Pantoja, su tío y mano derecha de su madre por estafa y apropiación indebida.
Isabel Pantoja, en Idol Kids / Gtres
Este sábado, Isabel Pantoja tomaba un avión de vuelta a Jerez. Llegaría para el 90 cumpleaños de su madre. Poca fiesta, que la cosa no está para brindis ni confeti, pero sí la alegría de poder abrazarla de nuevo. En casa, ni sus hijos Kiko e Isa, ni ninguno de sus nietos. Siguen siendo días difíciles en Cantora. El programa ‘Top Star’ se ha reprogramado a la noche de los sábados hasta el 26 de junio. Isabel los verá ya desde su casa, donde ya ha sido notificada para declarar en el juicio de su hermano Agustín. Su hijo Kiko la ha citado como testigo.