El temor de Alejandro Albalá en su nueva aventura empresarial
Alejandro Albalá quiere dejar de ser el eterno ex de Isa Pantoja. Y no, su solución no pasa por volver con Sofía Suescun -con la que aún no queda clara la relación actual – y desmarcarse de la que durante 3 años fue su pareja. Ha decidido emprender. Poner su propio negocio, y que así, nadie pueda decirle que ‘vive del cuento’. Desde que le conocemos lleva estudiando aeronáutica, pero ahora se ha decantado por la moda, por las gafas de sol concretamente. Y aunque está ilusionado tiene un gran pesar.
‘Karthereyewear’ es la firma con la que, junto a otro socio, Albalá venderá las gafas a través de una página web. Se definen como “una nueva marca de gafas, moderna, fresca, con ese toque ‘cool’ que todos queremos mostrar”. En este momento hay tres colecciones a la venta: Indian Ocean, Bambú Blue Extreme y Caribbean Sea. Los precios son bastante asequibles, oscilan entre los 24 y los 39 euros.
Un proyecto nuevo, con una puesta en escena tan cuidada, denota que hay ilusión y ganas detrás. Sin embargo, en este caso, además de eso, hay miedo. Hay un temor que a Alejandro le impide explotar al 100% su faceta de ‘personaje público’ para promocionar su negocio. “No me importa reconocer que es mío, pero no quiero tampoco que se sepa mucho porque habrá gente que al saberlo no querrá comprar” decía visiblemente preocupado en conversación con LOOK.
Sin embargo, no es demasiado complicado llegar a la conclusión. Y es que desde hace unos días él no deja de lucir gafas de la firma, de subir a sus redes fotos con ellas y etiquetarlas. Pero además se ha buscado una modelo, que evidencia más si cabe, su interés por dar a conocer el producto. Hace un par de días Sofía, la reciente ganadora de Supervivientes, publicaba una imagen apoyada en el coche de Alejandro con el modelo ‘Atacama’, uno de los más caros. Eso sí, no le etiqueta a él, tan solo dice que se las ha regalado alguien “muy especial”.
Ahora, que se ha desvelado quién está detrás de Karthereyewear, ¿se desplomarán las ventas, tal como teme Alejandro? ¿O el efecto será el contrario y funcionará mejor? Sólo el tiempo traerá la respuesta.