El aliado de Trump, Mike Johnson, nuevo líder de la Cámara de Representantes de EEUU

La Cámara de Representantes ha elegido este miércoles al representante republicano Mike Johnson, de Luisiana, como portavoz de la Cámara Baja, elevando a un conservador al puesto más alto después de tres semanas de luchas internas entre los políticos republicanas que frenaron los intereses de otros candidatos que aspiraban a suceder a Kevin McCarthy, representante de California. Así, Trump tiene un aliado más dentro de la Cámara.

Conocido por sus políticas conservadoras en cuestiones culturales y de gasto, Mike Johnson ha sido con amplia mayoría conservadora después de que el ex presidente de Estados Unidos le apoyara. «Mi contundente sugerencia es ir con el candidato principal, Mike Johnson, y hacerlo rápido», indicó el ex presidente republicano.

Miembro de menor rango dentro de los líderes del Partido Republicano en la Cámara de Representantes, Johnson surgió como el cuarto candidato conservador dentro de una carrera llenar de luchas políticas internas desde la destitución de Kevin McCarthy. Profundamente religioso, Johnson tiene pocos enemigos y un importante respaldo del Partido Republicano, como se ha indicado con anterioridad: Donald Trump.

«Creo que va a ser un líder de la Cámara fantástico», ha asegurado el ex presidente de Estados Unidos, que en los últimos días va en cabeza en las encuestas dentro del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de 2024.

Johnson, que ha formado parte del equipo de defensa del impeachment de Trump, se puso al frente de una campaña de recogida de firmas para apoyar a Trump en Texas para anular 20 millones de votos en otros cuatro estados.

Esta elección pone fin a tres semanas sin presidentes de la Cámara de Representantes, en las que no ha habido portavoz. «La democracia a veces es complicada, pero es nuestro sistema», ha indicado Johnson.

Mike Johnson se enfrenta a nuevos desafíos

El líder de la Cámara de Representes se enfrenta a una serie de cuestiones legislativas urgentes, junto con los retos de gestionar su estrecha mayoría cuando queda poco más de año para que haya de nuevo elecciones en noviembre de 2024. Entonces, no sólo habrá que elegir nuevo presidente, sino que también se renovará la Cámara Baja al completo y un tercio del Senado. Entre otro de los desafíos, será abordar la cuestión de mantener la financiación del gobierno, aprobar la petición del presidente Joe Biden de 106.000 millones de dólares para financiar la ayuda a Ucrania, Israel, Taiwán y gestionar el flujo de inmigrantes en la frontera estadounidense.

Johnson tendrá que echar mano de sus antiguas funciones de whip en la Cámara de Representantes, encargado de coordinar a los líderes del partido con el resto de los legisladores y asegurarse que voten conforme a los intereses del partido. Una fundación fundamental, debido a que en Estados Unidos no hay disciplina de partido y en ocasiones los miembros del Congreso votan en contra de su partido a favor de los intereses de sus votantes.