Así era la vida de Daniel Sancho antes de entrar en la cárcel: su trabajo y su edad

Hace poco más de un año Daniel Sancho era un auténtico desconocido para todos, pero a comienzos del mes de agosto de 2023 su nombre se convirtió en uno de los más buscados de nuestro país. El hijo del actor Daniel Sancho saltó a la actualidad después de confesar ser el culpable de la muerte de Edwin Arrieta, un cirujano colombiano con el que tenía una estrecha relación desde hacía tiempo. Un año después, un juez tailandés le ha encontrado culpable de la muerte con premeditación, por lo que tendrá que pasar el resto de su vida en una cárcel, siempre que no haya cambios. Así era la vida que dejó atrás en España, sus amigos y su trabajo.

Con 30 años, el futuro que le espera es completamente distinto al que tenía cuando en España era un chico atractivo y muy bien relacionado. Nacido el 11 de junio de 1994, sus padres son Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo, que se encontraron con la noticia de que serían padres cuando solo tenían 18 y 19 años respectivamente. Ambos se conocieron en el mundo actoral, por lo que Rodolfo decidió comenzar a trabajar en series como Al salir de clase para comenzar a mantener a su nueva familia. Silvia desapareció por completo y abandonó su carrera para centrarse en ser madre, aunque tiempo después dejó de lado el mundo de la interpretación y se dedica al mundo inmobiliario y de las inversiones. Su relación duró durante más de diez años, pero su amor se rompió pasado ese tiempo, por lo que decidieron separar sus caminos para siempre. Actualmente apenas tienen relación e incluso en un momento tan complicado no parece que sean capaces de acercar posturas.

Aunque nunca ha sido un personaje mediático, Daniel se quedó al cargo de su padre tras la separación, por lo que durante mucho tiempo vivió entre cámaras y equipos de rodaje de series y cine. De lo poco que se conoce de su infancia y su adolescencia es que tenía una prometedora carrera como tenista, algo en lo que se centró durante años, pero que nunca se cumplió. Siguió probando suerte con otros deportes por el boxeo, el surf o el muai thai, pero ninguno de ellos se convirtió en su profesión.

Su carrera como cocinero es uno de los puntos en los que sus conocidos y amigos ofrecen versiones muy distintas, ya que el propio Rodolfo Sancho llegó a decir que su hijo era propietario de dos negocios relacionados con el mundo de la hostelería. Se refería a un cátering y a una hamburguesería de moda en Madrid, aunque en realidad nunca ha figurado como propietario de ninguno de ellos, siendo el piloto de Fórmula 1 Carlos Sainz uno de los conocidos inversores de Boogie Burgers. El propio local llegó a emitir un comunicado negando que Daniel Sancho trabajase allí, asegurando que solo era «un colaborador en redes sociales».

Su pasión por el mundo de la cocina le llevó a ser un auténtico apasionado de los grandes restaurantes, donde acudía en compañía de su abuela siempre que podía. Otra de sus salidas profesionales era su canal de YouTube, llamado Puro disfrute y que sigue teniendo vídeos disponibles. En él realizaba recetas ante las cámaras donde acumulaba miles de visitas gracias a su naturalidad ante las cámaras. El acudir a Tailandia para grabar vídeos de recetas del país fue uno de los puntos que utilizó su defensa para justificar la compra de cuchillos y todo tipo de material de cocina que pudo ser utilizado para al atroz crimen.

La pareja de Daniel Sancho en España

Otro de los asuntos de los que no se han terminado de aclarar tiene que ver con sus relaciones amorosas. Mientras se hablaba de una relación con el propio Edwin Arrieta, que terminó de la peor manera al intentar acabarla, también se ha rumoreado que tuviera incluso planes de boda con una chica en España.

Pese a que se ha llegado a hablar de dos chicas, una madrileña perteneciente a una familia de empresarios y otra que habría conocido en un viaje a Ibiza, lo cierto es que ninguna ha querido confirmar que fuese su pareja. Que se sepa, tampoco ninguna de ellas ha viajado hasta Tailandia para visitarle durante el año que ha pasado en prisión preventiva.