El Comité Técnico de Árbitros (CTA) sorprendió este viernes al cambiar, a menos de 48 horas para el inicio del encuentro, al árbitro principal del partido del Real Madrid. El equipo blanco se mide este domingo al Deportivo Alavés en la 31ª jornada de Liga y el Comité liderado por Medina Cantalejo quitó de ese duelo a Juan Martínez Munuera para poner como colegiado a César Soto Grado. Detrás de este cambio hay un gran motivo.
La razón por la que será Soto Grado y no Martínez Munuera el colegiado del Alavés-Real Madrid es que el árbitro valenciano va a ser padre. Así, lo que hay detrás del cambio de colegiado en este partido de Liga es una gran noticia, un motivo de felicitación y alegría para Martínez Munuera.
En un primer momento, el designado para el partido en Vitoria era Juan Martínez Munuera. El colegiado valenciano iba a pitar el encuentro, pero ha causado baja por motivos personales, tal y como comunicó el propio CTA. Esos motivos personales son una gran noticia para el árbitro valenciano y su familia: va a ser padre.
Ante esta buena noticia, el CTA se vio obligado a cambiar de árbitro y tomaron la decisión de poner al frente del Alavés-Real Madrid a Soto Grado. El cambio se produjo el viernes por la noche, es decir, a ya menos de 48 horas de un encuentro que se juega el domingo a las 16:15 horas en el estadio de Mendizorroza.
Soto Grado, árbitro del Alavés-Real Madrid
Soto Grado es uno de los árbitros preferidos de Medina Cantalejo, el escondido jefe de los colegiados españoles. Sin embargo, no le trae muy buenos recuerdos a los madridistas. Soto Grado es uno de los colegiados que ha tenido últimamente sonadas polémicas contra los blancos. En actuaciones recientes, viene de expulsar a Vinicius en Mestalla o de señalar un surrealista penalti en contra del Real Madrid en el derbi de Liga ante el Atlético.
Así, Soto Grado será el encargado de estar finalmente en Mendizorroza, en el partido de la jornada 31 que enfrentará el domingo a los de Ancelotti contra los vascos el domingo a partir de las 16:15 horas. Mientras que los locales se encuentran inmersos de lleno en la pelea por eludir el descenso, los madridistas llegan con la obligación de ganar para mantener sus opciones en Liga.
