Rodrygo adelantó al Real Madrid contra el Athletic con un golazo impresionante desde la frontal del área en el minuto 7 de partido. El atacante brasileño, con Vinicius lesionado, cogió los galones del equipo y anotó el 1-0 con un disparo sublime. El brasileño también hizo el segundo con otro tanto sublime en el minuto 73.
Rodrygo Goes, que llevaba sin marcar con el Real Madrid desde el duelo contra el Girona en el Santiago Bernabéu del pasado 10 de febrero, volvió a anotar con los blancos frente al Athletic. Corría el minuto siete de partido, el atacante brasileño cogió la pelota en tres cuartos de campo y condujo la pelota hacia la portería rival. Hizo la diagonal con una velocidad endiablada y antes de llegar a la frontal le pegó directo a la escuadra. Era el 1-0 contra el cuadro vasco en el coliseo madridista. Un golazo precioso.
El segundo de Rodrygo llegó en el minuto 73. El primero tras pase de Brahim y el segundo tras asistencia de Jude Bellingham. El brasileño recibió la pelota dentro del área y se movió como pez en el agua para anotar otro gol brillante contra el Athletic para hacer el 2-0 y sentenciar el encuentro.
Un doblete de Rodrygo que supone su décimo tanto en Liga esta temporada y su decimoquinto en total entre todas las competiciones. No está siendo su mejor temporada, pero los números no son malos aun así. Sin Vinicius, sancionado, el equipo necesitaba su mejor versión y él dio la cara con un gran tanto. Marcó con Brasil en el Santiago Bernabéu el pasado martes y este domingo volvió a mojar con el Real Madrid.
El partido que realizó Rodrygo fue increíble. Tras el encuentro, ante los medios de comunicación del club, afirmó que él estaba tranquilo porque sabía que los goles llegarían tarde o temprano. Y eso pasó. Llegaron y por partida doble. Dos tantos que le dan a los blancos tres puntos muy importantes.
Rodrygo pidió un claro penalti
La primera acción polémica sucedió con Jude Bellingham. El británico se metió en el área y Paredes le cargó por detrás. Jude cayó al suelo y pidió penalti. Alberola no pitó nada y el VAR no entró. Pero pocos minutos después, la polémica se desató en el Santiago Bernabéu con una jugada mucho más escandalosa que tendría que haber terminado en penalti a favor del Real Madrid.
Vesga y Bellingham fueron a un cruce donde el jugador del Athletic tocó la pelota hacia su área y el jugador del Real Madrid no tocó ni al balón ni al rival. El cuero fue hacia Rodrygo, que se metió en el área y recibió un claro penalti de Lekue sobre él. Alberola pitó fuera de juego, que no podía ser, ya que el último en tocar fue Vesga. También pudo pitar falta, pero tampoco la hubo, ya que Bellingham no toca al jugador del Athletic. En definitiva, Alberola no sabía lo que había pitado y el VAR no entró para corregir una jugada escandalosa que terminó perjudicando a los blancos con 1-0 en el marcador en ese momento.